¿Honras a Dios?

Él considera a quienes también lo consideran

¿Honras a Dios? ¿Te has detenido para pensar sobre lo que es honrar a alguien?

¿Por qué es importante?

Dios habla con cada uno por medio de Su Palabra y es muy importante que prestes atención a lo que el Altísimo dice:

«El hijo honra a su padre, y el siervo a su señor. Pues si yo soy padre, ¿dónde está mi honor? Y si yo soy señor, ¿dónde está mi temor? —dice el Señor de los ejércitos a vosotros sacerdotes que menospreciáis mi nombre—. Pero vosotros decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre?» (Malaquías 1:6).

Este fragmento de Malaquías estaba dirigido a los sacerdotes de Israel de la época, pero hoy va para todas las personas que dicen que Jesús es su «Señor». Pero ¿qué es honrar?

Honrar es darle importancia a una persona en tu vida. Esta persona posee privilegios que ninguna otra tendrá y es tratada con total distinción de las demás. Todo eso es motivado por el profundo respeto y admiración que tienes por ella. Y, para honrarla, estás dispuesto a hacer lo sacrificios debidos.

Como ejemplo están los padres: para honrarlos, vas a colocar en práctica las enseñanzas que te dieron. Serás un hijo trabajador, vivirás con dignidad y de manera que no los avergüences. Los padres son 2 entre las tantas personas que debemos honrar.

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Pero existe Alguien que es el Único digno de toda honra, y Dios considera tanto a quien vive por este principio que el propio Señor Jesús dice que quien así lo haga, tendría la honra de ser amado por Él y por Dios, y Ambos harían de esa persona su morada y vivirían para esa persona. Incluso, aunque la persona esté viviendo días difíciles, es necesario que nunca deje de honrar a Dios.

En el pasaje bíblico anterior, Dios se coloca en Su lugar y nos pone en nuestro lugar diciendo: «el hijo honra al padre y el siervo a su señor». Es decir, no existe eso de «merezco, no merezco». Muchas personas dicen: «mi vida no funciona» o piensan «yo solo nací para sufrir». ¡Pero la verdad es que Dios honra a los que lo honran!