«Por dedicarme a la brujería era atormentada por espíritus» 

«Durante mucho tiempo practiqué la brujería. Cobraba entre 5 mil y 20 mil pesos por cada trabajo que solicitaban las personas que acudían a mí buscando ayuda para solucionar sus problemas. Aunque a veces funcionaba, sabía que todo eso tenía un alto precio. 

Todo el tiempo mostraba ser una persona que no era, en apariencia ayudaba a los demás, pero por dentro sentía un gran vacío y tenía problemas en casa.  Además, durante la noche tenía muchos tormentos espirituales, me daban parálisis de sueño y mi esposo y yo percibíamos una sombra que intentaba asfixiarnos, también aparecía un niño que jugaba en la casa y a mi hijo le jalaban los pies. No siendo suficiente, mi salud fue empeorando, me enfermé de diabetes, tenía cristales en el riñón, problemas en el hígado y presión alta. Pero lo que más me marcó fue la muerte de mi mamá, porque a pesar de tener muchos espíritus a mi favor, no pude hacer nada para ayudarla. 

Fue en esta condición que conocí la Universal, gracias a un periódico que encontré tirado en la calle en donde se hablaba de problemas espirituales, fue así que tomé la decisión de asistir y participar, no me importaba el día que fuera, necesitaba tanto la ayuda que dejaba todo lo que estuviera haciendo. 

El proceso no fue fácil, tuve que renunciar a todo lo malo que estaba haciendo, pero una vez conociendo la verdadera fe estuve dispuesta hacer todo para ser libre.  y a través de mi fe, pude ser libre de los tormentos espirituales y de todas las enfermedades por las cuales estaba pasando, además de que pude tener un encuentro verdadero con Dios. Gracias a Él mi vida salió de la podredumbre en la que me encontraba y pude tener paz y ser en verdad feliz.» – María Vargas Zarco 

Viernes de Liberación Espiritual

No existe otra manera para mantenerse protegido, la única opción es estar bajo el cuidado y protección de Dios. Quienes no tienen la armadura del Altísimo están propensos y vulnerables a cualquier ataque.

Y a quienes quieren contar con esta protección, y liberarse de la presencia del mal en sus vidas, les hacemos una invitación muy especial: cada semana se lleva a cabo la reunión de Viernes de Liberación Espiritual, un encuentro en donde podrán orientarte sobre tu caso y, por medio de tu fe, recibir la armadura de Dios.

Te esperamos, especialmente a las 3 p. m. y 7 p. m., en Avenida Revolución núm. 253, col. Tacubaya, alcaldía Miguel Hidalgo, CDMX. O en la Universal más cercana a tu hogar.

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