Padres y tutores, atención a las señales de depresión infantil

En todo el mundo, más de 300 millones de personas de todas las edades sufren por la depresión. Esta estimación es de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Y, dentro de este contexto, la depresión infantil es un cuadro clínico que cada vez es más visto por los especialistas.

En México, por ejemplo, según datos de la UNAM «el 50 por ciento de los trastornos mentales empiezan antes de los 14 años […] además la tasa de suicidios ha ido en aumento en la población entre los 10 y 14 años.».

¿Cómo identificar la depresión infantil?

En una entrevista reciente al psicólogo especialista en salud mental infantil, Miguel Buge, comentó que el cuadro se manifiesta diferente en los niños.

«En la depresión infantil percibimos muchas señales de irritabilidad y llanto exagerado, que son características menos aparentes en los adultos. También hay alteraciones de autocuidado (el niño pasa a no querer bañarse, ni cepillarse los dientes), además de la culpa excesiva y desesperanza, por ejemplo», explicó.

También señaló que «pueden existir comportamientos de automutilación, como agarrar objetos punzocortantes y lastimarse; alteraciones en la alimentación y en el sueño; aislamiento social (la persona empieza a querer estar sola, no quiere salir ni ver personas); y bajo rendimiento escolar».

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Atención, padres y tutores:

Entre los principales motivos que influencian un cuadro depresivo en niños están el bullying y el ciberbullying (acoso a través del internet), situaciones de violencia doméstica con padres que se muestran agresivos física o verbalmente, además de contar en su familia con algún historial de suicidio.

Por lo tanto, platicar y escuchar a tu hijo, acompañar su desenvolvimiento escolar y su comportamiento, conocer su círculo de amistades y estar atento a los contenidos que mira en internet y por otros medios de comunicación, entre otros, son algunas medidas de protección, cariño y cuidado que se puede tener con el niño.

La fe como herramienta

La depresión también es una señal de dolor en el alma y del vacío que la persona siente en su interior. Duda, miedo, tristeza profunda; estos síntomas son difíciles de expresar para una un niño.

Los padres que están atentos a sus hijos, y perciben las señales, necesitan buscar ayuda espiritual para coadyuvar a la sanidad del niño. Llevando la Palabra de Dios hasta ellos y mostrándoles que la fe es la única herramienta eficiente en el combate de las aflicciones del alma.

Usted puede encontrar ayuda para cumplir esa misión en la Escuelita Bíblica Infantil (EBI). Más allá de orientar a los niños sobre la importancia de dar atención a las enseñanzas de sus padres, las voluntarias que participan en el proyecto están preparadas para darles soporte y orientación a los padres y tutores que precisan de auxilio en la educación de sus hijos.

Además, si tú o tu familiar tienen depresión y/o te identificaste con lo descrito arriba, te invitamos a participar en la reunión Vida a Colores, todos los domingos 3 p. m., en el Templo de los Milagros: Av. Revolución núm. 253, en la colonia Tacubaya, CDMX. Por tu fe podrás superar la depresión.  

También puedes consultar el horario de la reunión en la Universal más cercana a tu domicilio. 

(*) La asistencia espiritual no sustituye los cuidados médicos. Será el tipo de trastorno, su origen y el modo de ser de la persona los que configurarán la manera de orientar, en cada caso

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