Agua para tu vida amorosa

El objetivo de la Terapia del Amor es combatir el espíritu del desamor, quien es causante de que haya tantas relaciones frustradas y matrimonios deshechos. Sin embargo, no basta combatirlo, es necesario sustituirlo con el Espíritu del Amor para que se cumpla en tu relación lo que el Señor Jesús le dijo a la mujer samaritana:

“… si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber; tú le pedirías, y él te daría agua viva (…) Más el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna” (Juan 4:10 y 14).

Solo la Presencia del Espíritu Santo, que es el Agua Viva que prometió Jesús, es capaz de traer a tu relación la existencia del verdadero amor, la armonía, complicidad, fidelidad, compañerismo y todo aquello que te falta para realizarte en el aspecto amoroso.

Por lo tanto, si tú:

• Tienes una relación frustrada
• Sufres infidelidad e indiferencia de parte del ser amado
• Nunca has sido feliz en el amor
• Arrastras traumas de relaciones anteriores
• Solo te relacionas con personas equivocadas
• Sufres por las constantes peleas y malentendidos en tu matrimonio
  
• Es porque falta del Agua Viva en tu vida.
  Por eso, te invitamos a la Terapia del Amor, donde realizaremos la oración para el Cambio de Espíritu y así, mediante tu fe, a partir de ese momento, seas plenamente feliz y dichoso en la vida amorosa.

“Mi marido me abandonó de la noche a la mañana”

“Luego de 15 años de matrimonio, mi esposo dejó de dormir conmigo y a la semana se fue de la casa, abandonándome sin darme explicaciones.

Desconcertada, deprimida y triste me preguntaba que había hecho mal; busqué respuestas en la brujería, pero me topé con un abuso sexual por parte de un brujo y, aunque dos veces intenté suicidarme, afortunadamente no lo logré.

Mi carácter cambió, era agresiva y ni hablar de mi apariencia: no me bañaba ni quería hacer nada más que encerrarme en mi recámara, en las noches tenía insomnio y sueño por la mañana. Las más afectadas fueron mis hijas, no las atendía, me desquitaba con ellas, les gritaba y también cayeron en depresión.

A los tres meses de no saber nada de mi marido, quien se había ido a Estados Unidos, me llamó para decirme que quería una nueva oportunidad y que regresaría. Si bien ya sabía que existía la Universal, veía el programa de televisión e incluso me sentía bien, decidí venir después de tres años al darme cuenta que mi vida estaba mal… ¡y no me arrepiento! Luego de años de no dormir, desde ese primer día, logré hacerlo, encontré la paz que siempre busqué, usé mi fe y mi vida, al igual que mi carácter, cambió.

Perdoné tanto a mí misma como a los demás, mi familia está unida y, sobre todo, sané mi interior. Soy una mujer diferente a la que fui en el pasado”, Magdalena.

Terapia del Amor

Este jueves participe en Av. Revolución 253, Colonia Tacubaya, a las 7:30am, 10am, 4pm y 7pm.