«Un gato muerto y una cruz invertida acabaron con mi negocio» 

«Cuando tenía hambre o hacía corajes, necesitaba fumarme unos cigarros, ese vicio estaba muy arraigado en mí. Y ese no era el único mal que traía cargando. También llegué a tener muchas pesadillas y escuchaba que me llamaban por mi nombre en sueños; fue muy extraño, llegué a sospechar que me estaban haciendo brujería», explicó Moisés Guillermo, quien lidiaba con esos tormentos. 

Sin embargo, lo que él enfrentó no solo le quitó la tranquilidad, pues también fu víctima de la envidia, lo que le provocó problemas al grado de perder su fuente de ingresos. 

«Yo tenía mi negocio de frutas y verduras, ahí me iba bien. Pero de un momento a otro empezaron a dejarme cosas; me tiraron un gato muerto, aceite quemado, monedas de bajo valor, aceite negro en forma de cruz invertida… Las ventas bajaron, mi negocio fue cayendo y llegó el momento en que tuve que cerrar», relató. «Había personas ahí que empezaron a vender lo mismo que yo, me tuvieron envidia». 

Al respecto, el obispo Edir Macedo refiere que muchas personas pierden empresas, negocios, relaciones y bienes materiales a causa de la envidia. No obstante, no es necesario seguir perdiendo para comenzar a buscar la ayuda de Dios. 

«Mi mamá ya acudía a la Universal, entonces, comencé a acudir también. Empecé a ir los viernes y a participar en los propósitos que se realizan en esta oración de liberación. Tuve que buscar a Dios y usar mi fe, inclusive, me liberé del vicio del tabaco, ni me di cuenta del día en que esto sucedió, pero ya me daba asco el cigarro. Y poco a poco también me fui liberando de mis tormentos, de la depresión, la envidia y de los trabajos de brujería que me hicieron».  

Moisés agregó que «es importante no dejar de ir los viernes para no dar cabida a que el mal entre en uno. No podemos dejar de buscar a Dios, pero principalmente, es vital recibir el Espíritu Santo, que es tener la presencia de Dios viviendo en nosotros». 

«A las personas que han sido víctimas de brujería o de la envidia les invito a que acudan los viernes y los domingos a la Universal, no importa la creencia que tengan. Dios, a través de nuestra fe, nos hace libres de todo lo malo», finalizó. 

Viernes 29 de diciembre

No desaproveches la oportunidad para eliminar de tu interior todo lo que te está perjudicando y no te permite tener una vida como la que Dios te quiere dar. Te esperamos este viernes 29 de diciembre, especialmente a las 7 p. m., en el Templo de los Milagros (Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya, CDMX), o en la Universal más cercana.

Además, lleva una flor blanca para que sea ungida con el aceite del Abre Caminos. ¡A través de tu fe, la situación será transformada!

(*) La asistencia espiritual no sustituye los cuidados médicos. Será el tipo de trastorno, su origen y el modo de ser de la persona los que configurarán la manera de orientar, en cada caso.