¿Te sientes «amordazado»?
Muchos cristianos se sienten «amordazados» en el ambiente del trabajo, de acuerdo con un estudio
Un estudio, realizado por la consultora de psicología empresarial Pearn Kandola, revela cómo los cristianos se sienten ridiculizados y acosados al profesar su fe en el ambiente de trabajo.
El problema general
El sentimiento de ser «amordazado» hace que muchos cristianos se sientan incapaces de compartir su fe, señala la investigación. Muchos temen expresar su creencia para evitar incomodar a los colegas de trabajo que tienen una visión religiosa diferente.
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En algunos casos, el simple hecho de confesar su fe puede ser el motivo que lleva a muchos cristianos a desanimarse, u optar por actuar una fe indefinida, por temor de los comentarios de los demás. En el ambiente de trabajo, la mayoría de las veces, esto es algo común e imperceptible.
Se engañan aquellos que piensan que no definir su fe es el mejor camino para evitar «problemas», puesto que Dios es un dios de definición, y se agrada de los que tienen el mismo carácter (Mateo 5:37).
¿No sabes qué hacer en situaciones como esta?
No te sientas presionado, permanece con tu confianza firme en el Señor, pues solamente Él es justo para justificarte.
Las personas pueden hablar mal y burlarse de tu fe, ¿y qué tienes qué hacer? ¿Abatirte, desanimarte, deprimirte? ¡No! Lo que tienes que hacer es deleitarte en Dios.
«Que se encomiende al Señor; que Él lo libre; que Él lo rescate, puesto que en Él se deleita» (Salmos 22:8).
Deleitarse en el Señor significa tener placer en glorificarlo a través de tu vida, independientemente de cuáles sean las etiquetas que te darán por eso. Siendo así, sé determinado en tu fe, mostrando el carácter del Señor Jesús a través de tu buen testimonio, manteniendo también siempre, claramente, respeto y consideración por aquellos que están a tu alrededor.
«Si ustedes son insultados por el nombre de Cristo, dichosos son, pues el Espíritu de gloria y de Dios reposa sobre ustedes» (1 Pedro 4:14).
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