Primer pensamiento

«Por la mañana hazme oír Tu misericordia, porque en Ti confío; enséñame el camino por el que debo andar, pues a Ti elevo mi alma.» (Salmos 143:8).
Desde temprano en la mañana, el primer pensamiento para el Grandiosísimo Señor debe ser: «oriéntame y guíame, Señor, pues hoy mi alma depende de Ti para vivir en este mundo turbulento, guárdame y protégeme de todo el mal».
Por Ester Bezerra
Santo Culto – Domingo de diciembre
Entradas recientes
- Ayuno de Daniel: eres el resultado de tus pensamientos
- ¿Dios está demasiado ocupado como para no preocuparse por mí?
- Este miércoles participa en la continuación del Estudio de los Misterios del Getsemaní
- Lumbalgia: ¿cómo evitar lesiones?
- JESÚS, AUNQUE ERA HIJO, APRENDIÓ OBEDIENCIA POR LO QUE PADECIÓ













comentarios