«Por los abusos y maltratos en mi infancia caí en depresión» 

«Crecí en un ambiente precario, lleno de conflictos, peleas con mis papás, maltratos y un abuso por parte de mi hermano. Por ello, y con depresión, en la adolescencia decidí de salirme de mi casa. No obstante, no fue la mejor decisión porque empecé a vivir desenfrenadamente: me involucré con malas amistades y, por curiosidad y el deseo de encajar, consumí drogas. Permití que esto pasara para llenar el vacío que había en mi interior. 

Mi mamá fue quien me acercó a la Universal. Desde el primer día noté una diferencia, a pesar de eso, me costó mucho asumir un compromiso con Dios porque no quería reconocer que me encontraba mal. Hasta que un día entendí que todo lo que necesitaba era a Él. Fue así que tomé la decisión de abandonar todo lo que me perjudicaba. Después de haber sufrido tanto, por la fe, dejé todos los vicios, logré terminar mis estudios y ya no paso carencias. Aunque, ante todo, el Espíritu Santo es mi mayor tesoro.» -Aracely Hernández 

Reunión del Espíritu Santo

Esta historia revela cuál es la clave para tener una vida diferente: tener un pacto, un compromiso con Dios de seguir Su Palabra de ahora en adelante. Ten la seguridad de que Él podrá hacer en tu vida lo inimaginable. Al tomar esta decisión con fe, tienes la garantía de que nada será como antes.

Te esperamos este domingo en la Reunión del Espíritu Santo, especialmente a las 10 a. m., en el Templo de los Milagros. Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya. O bien, en la Universal más cercana.

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