«Me endeudé con préstamos del banco… ¡no teníamos dinero ni para comer!»

«Pensando que sería muy feliz, me casé muy ilusionada. Sin embargo, la infidelidad, por parte de mi esposo, afectó mi matrimonio y el amor se convirtió en peleas diarias.

Económicamente perdimos todo, tocamos fondo cuando faltó el dinero para la comida. Queriendo salir de esa situación, solicité prestamos al banco, pero llegó un punto donde se me dificultó pagar y nos quedamos hasta el cuello de deudas.
Para sentirme mejor y calmar mis nervios, mi remedio era fumar, ya que, además de alterarme por todo, me sentía incompetente, mi autoestima estaba en el piso y, sintiendo que no valía nada, tuve deseos de morirme.
Un día que mi esposo llegó a la casa, vimos por la televisión el programa de la Universal. Decididos a obtener un cambio de vida, acudimos sin dudarlo.
Ahí nuestra experiencia fue increíble, porque desde el primer día dejé de fumar y es fecha que no he vuelto a agarrar un cigarro ni se me antoja.
En ese lugar encontré paz, tranquilidad y aprendí a usar la fe para obtener grandes bendiciones. No obstante, primero tuve que cambiar internamente.

Cuando aprendí a confiar en Dios, por medio de la Hoguera Santa, Él nos abrió las puertas. De vivir con carencias, nos convertimos en empresarios con diversos negocios y salimos adelante.

Entre nosotros hay amor, las infidelidades se terminaron. Mi esposo y yo nos entendemos muy bien.

Sé que hay muchas personas que están en la situación que yo me encontraba en el pasado o peor, pero si le dan un voto de confianza a Dios, Él puede realizar un milagro en ustedes. Si lo hizo conmigo, ¿por qué no lo haría contigo?» -Rosa Martha