Las cuatro voluntades que le rodean

¿Cuál de ellas usted ha atendido?

Desde el nacimiento, el ser humano tiene que lidiar con cuatro voluntades. Y saber lidiar con cada una de ellas es fundamental para que alcance la Salvación del alma.

El apóstol Pablo, en la carta a los Romanos, escribió: “Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago” (Romanos 7:15).

El secreto para el ejercicio de la fe

De acuerdo con el obispo Adilson Silva, este versículo revela el secreto para el ejercicio de la fe, pues solamente con la práctica de esta es posible alcanzar la vida eterna.

Según él, el apóstol está “intentando mostrarnos que el secreto para el éxito de nuestra fe está en contrariar nuestra propia voluntad, de manera que lo que tenemos ganas de hacer, no lo hacemos. Y lo que no tenemos ganas de hacer, eso hacemos. Esa es la esencia del Evangelio, que se relaciona con el sacrificio, a la renuncia y a la autonegación”, concluyó.

También lea: 5 tips para mantener el enfoque en el Reino de Dios

Tal vez usted sea aquella persona que no tiene ganas de orar, leer la Biblia, ir a la iglesia o bautizarse. Sin embargo, necesita entender que para obedecer la Palabra de Dios no es necesario sentir ganas, basta creer y ponerla en práctica.

Vea cuáles son las cuatro voluntades que nos rodean:

1. Nuestra voluntad
2. La voluntad de las personas
3. La voluntad del diablo
4. La voluntad de Dios

Vivir la fe cristiana es negar continuamente las tres primeras para hacer la cuarta, la voluntad de Dios. La única capaz de llevarnos a una vida con Dios en el presente y, en el porvenir, a la vida Eterna. Las otras tres, fatalmente, nos conducirán al camino del infierno.

La elección correcta

Muchas personas, lamentablemente, viven en conflicto, preocupadas por la opinión de terceros y en agradar a todos.

Si usted quiere ser salvo, no puede guiarse ni por su voluntad, ni por la de otras personas. Cuando hace eso, automáticamente ya está haciendo la voluntad del diablo.

La única opción es hacer la voluntad de Dios, pero, para eso es necesario contrariar al mundo, a las personas, al infierno y a la propia vida, destaca el obispo Adilson.

Conforme a lo que dijo el propio Señor Jesús:

“Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame” (Lucas 9:23).

E incluso:

“Si alguno viene a Mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser Mi discípulo” (Lucas 14:26).

No es una tarea fácil, pero es una cuestión de decisión. En esto consiste la esencia del Evangelio: desagradar al mundo y a sí mismo.

Para saber más sobre la voluntad de Dios para su vida y aprender a ejercitar la fe, participe todos los miércoles en la Escuela de la Fe. Una reunión para su crecimiento y fortalecimiento espiritual.

Las reuniones se llevan a cabo en el Santuario de la Fe, en Av. Revolución núm. 253, Col. Tacubaya o en el Centro de Ayuda Universal más cercano a su casa. Consulte aquí la lista de direcciones.