La ciencia lo comprueba: el ser humano permanece consciente después de la muerte

Vea lo que sucede después del último suspiro de vida

El corazón se detiene, la persona da su último suspiro y, a veces, no tiene tiempo para cerrar los ojos. La muerte llegó a ella. Pero ¿qué sucede después? Esta pregunta ha intrigado a muchas personas durante miles de años. Saber que lo que sucede de verdad después del último suspiro es una curiosidad de muchos, incluso de la ciencia.

De acuerdo con un estudio realizado por científicos del departamento de Cuidados Intensivos y Resucitación, de Langone School of Medicine, de la universidad de Nueva York, el ser humano continúa consciente después de la muerte.

Es decir, incluso después de que el cuerpo ya no presenta más signos vitales, la persona continúa consciente. Para el estudio, los científicos analizaron a las personas que tuvieron ataques al corazón, murieron y fueron reanimadas. Después del estudio, todos los pacientes analizados afirmaron que, incluso después de la muerte, oyeron a los médicos certificando la defunción y lo que sucedía a su regreso.

¿Qué dice la Biblia al respecto?

Hay un sinnúmero de relatos sobre la muerte en la Sagradas Escrituras. La ciencia llegó a la conclusión sobre lo que la Biblia, desde hace miles de años, ya había advertido. Después de la muerte, el cuerpo vuelve a la tierra, el espíritu —que es el aliento de vida— regresa a Dios (lea Eclesiastés 12:7) y el alma tiene su destino trazado.

“… y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.” (Juan 5:29).

Los que están salvos, encontrarán la salvación; no obstante, los que mueren sin entregar sus vidas a Dios, no pueden heredar la vida eterna.

“Si la persona muere creyendo en el Señor Jesús como el Único Señor y Salvador, dos ángeles vienen a buscar su alma. Pero, cuando muere sin aceptar al Señor Jesús y sin vivir una vida de acuerdo con la Palabra de Dios, entonces, no tiene salvación”, enseñó el obispo Edir Macedo.

Además de eso, el obispo señaló que cada persona debe responder por sí misma, sobre el destino de su alma. Sus actitudes, mientras viva, definirán en dónde pasará la eternidad.

“Depende de cada uno. Ya está determinado que el cuerpo vuelve a la tierra y que el espíritu regresa a Dios, pero, ¿y el alma? Usted es quien va a responder a dónde va el alma. ¿Usted le tiene miedo a la muerte? Entonces, es porque usted no sabe a dónde va”, alertó.

Cuide su alma

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