Entrada triunfal de Jesús a Jerusalén

Entrada triunfal de Jesús a Jerusalén

Por Departamento Web 2

La historia se vuelve cada vez más intensa con cada uno de los milagros que suceden. ¿Te la perdiste esta semana? Aquí te mantenemos al tanto.

«Tu fe te ha sanado»

Un hombre ciego, desesperado por encontrar a Jesús y recobrar la vista, se detiene al borde del camino. Al escuchar el bullicio de una multitud, comienza a pedir limosna. Pero cuando se entera de que Jesús está presente, clamó con todas sus fuerzas: «¡Jesús, ten misericordia de mí!». A pesar de las objeciones de aquellos que quieren silenciarlo, el ciego persevera en su súplica. Finalmente, Jesús lo llama, y el ciego, desprendiéndose de sus posesiones más preciadas, se acerca a Jesús. En ese momento, Jesús le dice: «Tu fe te ha sanado», y el hombre recupera la vista.

Mientras, en Jerusalén, la salud de Helena empeora. Sus padres ya no sabían qué más hacer, ya que ningún brujo, ungüento o pócimas funcionan para que la herida cerrara. María Magdalena toma la valiente decisión de llevar a Tadeo y Juan para que vean la condición de Helena. En el momento en que Tadeo se acerca a verla, lamentablemente ella fallece en ese instante, pero Juan, movido por la fe, pronuncia una oración en el Nombre de Jesús, y Helena es sanada.

Hasta la posteridad

Cuando Jesús regresa a la casa de Lázaro en Betania, es recibido con alegría y gratitud. María de Betania decide ofrecerle lo más valioso que posee junto con sus hermanos: una libra de perfume de nardo puro. Unge los pies de Jesús y los seca con sus cabellos, llenando la casa con el aroma del perfume. Judas, sin embargo, se molesta y cuestiona: «¿Por qué no se vendió este perfume por trescientos denarios y se dio a los pobres?» (Juan 12:5). Siendo él ladrón de todas las ofrendas y que sus intenciones no eran buenas, Jesús le dijo: «Déjala, para que lo guarde para el día de Mi sepultura. Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros; pero a Mí no siempre Me tendréis.» (Juan 12:7-8).

Venganza por el sufrimiento del pasado

El rencor de Barrabás hacia Petronio es tan intenso que lo lleva a desear la muerte de la hermana del centurión, Casandra, de la misma manera en que mataron a su padre, para que sienta el mismo dolor. Sin embargo, un milagro ocurre cuando Casandra clama a Dios en busca de ayuda, y en el momento en que iban a prenderla en fuego, una lluvia cae del cielo, permitiendo que encuentren a Petronio y Casandra. Por lo tanto, Barrabás y sus secuaces son detenidos.

Obsesión por acabar con Jesús

Caifás llegó al punto de citar a los demás escribas y acusar a Jesús de realizar milagros fraudulentos. Ofrece una recompensa a quien lo entregue para ser condenado a muerte.

La entrada triunfal

Jesús va a Jerusalén montado en un burro, acompañado de Sus discípulos y seguido por la multitud. Detiene su paso y, con lágrimas en los ojos, pronuncia estas palabras: «¡Si tú también hubieras sabido en este día lo que conduce a la paz! Pero ahora está oculto a tus ojos. Porque sobre ti vendrán días, cuando tus enemigos echarán terraplén delante de ti, te sitiarán y te acosarán por todas partes. Y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, porque no conociste el tiempo de tu visitación.» (Lucas 19:42-44). Los discípulos comprenden que, una vez más, los judíos van a cometer el error de rechazar a un profeta y dudar de la Palabra de Dios.

Al entrar a la ciudad, la gente tenía palmas en las manos y empezaron a gritar: «¡Hosanna! Bendito el que viene en el nombre del Señor, el Rey de Israel.» (Juan 12:13). Mientras Jesús pasaba, la multitud colocaba sus túnicas en su camino en señal de adoración y agradecimiento por los milagros que han experimentado gracias a su fe.

Ya dentro del templo, Jesús declaró: «Ahora mi alma se ha angustiado; y ¿qué diré: «Padre, sálvame de esta hora»? Pero para esto he llegado a esta hora. Padre, glorifica tu nombre. Entonces vino una voz del cielo: Y le he glorificado, y de nuevo le glorificaré. Por eso la multitud que estaba allí y la oyó, decía que había sido un trueno; otros decían: Un ángel le ha hablado. Respondió Jesús y dijo: Esta voz no ha venido por causa mía, sino por causa de vosotros.Ya está aquí el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera. Y yo, si soy levantado de la tierra, atraeré a todos a mí mismo.» (Juan 12:27-32). A pesar de todo eso un escriba le preguntó: «¿Quién es el hijo del hombre?», a lo que Jesús responde: «Todavía, por un poco de tiempo, la luz estará entre vosotros. Caminad mientras tenéis la luz, para que no os sorprendan las tinieblas; el que anda en la oscuridad no sabe adónde va. Mientras tenéis la luz, creed en la luz, para que seáis hijos de la luz.» (Juan 12:35-36). Jesús deja claro que Él es la luz del mundo y que aquellos que creen en Él serán librados de todo mal.

Ceguera espiritual y un corazón endurecido

A pesar de todos los milagros que presenció Caifás y los demás escribas, aun así no creían que Jesús es el Hijo de Dios, por lo que siguen tramando una forma de poderlo capturar. Por lo que se hace una reunión en la casa del sumo sacerdote para impedir que Jesús siguiera predicando.

Ideas de una rebelión en contra de Roma

Judas alberga la idea de un nuevo reino. Al hablar con Chuza, le hace saber que quiere iniciar una rebelión. Pero Chuza le informa que Caifás está cazando a Jesús y está ofreciendo una suma de dinero por su captura. Aunque en su entrada a Jerusalén no intentaron nada debido al gran número de seguidores de Jesús, Judas le dice a Chuza que es el momento de comenzar la revolución. Sin embargo, Chuza se niega, aunque le sorprenden las ideas de Judas.

Conspiración en contra de Jesús

En el patio del sumo sacerdote se lleva a cabo una reunión para incriminar a Jesús como un opositor al Imperio Romano. Planean infiltrarse haciéndose pasar por seguidores de Jesús. Por lo tanto, Caifás llama a Petronio para asegurarse de que Jesús caiga en la trampa y sea arrestado.

Sin embargo, cuando le preguntan a Jesús sobre el pago de impuestos, Él responde: «Pues dad al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios.» (Lucas 20:25). Al ver esto, el centurión se molesta por haber perdido su tiempo. Por lo tanto, los escribas y el sumo sacerdote se enfurecen al ver que, una vez más, no logran capturar a Jesús.

¿Dónde puedes seguir esta historia?

Sintoniza UNIFE en el canal 8.3 de TV abierta, de lunes a viernes a las 10 p. m. También puedes verlo en streaming en el sitio web. Además, no te pierdas el resumen semanal todos los domingos a las 8 p. m.

También puedes seguir leyendo: ¿Por qué no consigo alcanzar la paz en mi vida?

  • Biblia en 1 año
    Desafío de lectura de la Biblia en 1 año

Ofrenda Online

El perdón que cura

comentarios

[fbcomments url="https://universal.org.mx/entrada-triunfal-de-jesus-a-jerusalen/" width="100%" count="off" num="3" countmsg="wonderful comments!"]

Abrir WhatsApp
💬 ¿Deseas hablar con un Pastor?
Pastor Online
Hola 🧑🏻‍💻 Dios te bendiga.

Envíenos un mensaje a nuestro WhatsApp, y vamos a brindar toda la atención que necesites👏🏻.