En el último mes de 2019, el UEC visitó cerca de 27 reclusorios

Diciembre se caracteriza por estar lleno de festejos y regalos, por lo regular, en familia o con lo seres más amados. No obstante, mientras algunos pasan esas fechas entre sonrisas, otros no. Pese a que, en México, en el 2019, la población en cárceles disminuyó un 25 %, hay quienes aún no cumplen su sentencia y no tienen la oportunidad de pasar momentos de alegría en época decembrina.

Por eso, el proyecto Universal Evangelización Carcelaria (UEC), en nuestro país, visitó alrededor de 27 reclusorios para llevar un mensaje, con base en la Palabra de Dios, que despierte la fe de los internos e internas para entregarse a Él, reivindicarse y esforzarse por conseguir un mejor porvenir que, por diversas razones, se vio truncado.

En el Mes de la Solidaridad, como fue nombrado por la organización, hubo resultado de dichas visitas, donde las oraciones tampoco pueden faltar, pues cerca de 153 reclusos, en diferentes puntos, tomaron la decisión de bautizarse en las aguas, ceremonia que representa un recomienzo espiritual al lado del Señor Jesús.

Asimismo, se entregó ayuda física, como 2375 kits de higiene personal, 2 500 almuerzos, 300 cobijas y 53 biblias. También, los voluntarios del UEC hicieron una labor aparte con los familiares de los internos, quienes esperan a las afueras de los centros penitenciarios. En total, a ellos se les regalaron 5 000 comidas y 608 kits con los mismos productos que a sus seres queridos que están adentro.

Quizá te preguntes: ¿cómo esto es posible? Gracias a la colaboración de obispos, pastores, voluntarios y miembros de la Universal, que siempre aportan algo con mucho amor y, sobre todo, fe.