Si deseas prosperar, evita personas negativas

Si deseas progresar financieramente, seguro deberás ser más precavido en cuanto a las personas con las que te juntas. Personas negativas hay en todos lados, aquellas que siempre le ven el lado malo a las cosas y que se justifican por no haber logrado sueños, o bien, que culpan a terceros de sus fracasos o frustraciones. Para ellas, nunca hay oportunidad y por eso se la pasan reclamando.

“El problema de la persona negativa es que puede contagiar a quienes son entusiastas. Es muy raro que veamos lo contrario. La negatividad es como un vacío que va absorbiendo todo lo que existe a nuestro alrededor. Si no tienes cuidado, terminarás absorbido por este tipo de personas”, explica Jadson Santos, conferencista y experto en temas financieros.

Una cosa es cierta: quien quiere crecer, no gasta su energía con personas negativas. Una persona exitosa es la que se enfoca en su propio crecimiento y en ayudar, en la medida de lo posible, a que otros crezcan también.

“Rodéate de personas que puedan aportar algo bueno en ti y a las que tú también les puedas ser útil. Busca con las que tengas mayor afinidad, de buenos principios, que tengan un carácter ejemplar y en las que puedas confiar. No olvides algo: muchas cáscaras hermosas esconden huevos podridos”, finaliza Santos.

Lograron vencer sus problemas financieros

Raúl Pérez

“Tenía muchos problemas, principalmente en mi trabajo y mi economía se afectó: pedí prestado y vendí mis pertenencias porque no me alcanzaba el dinero para cubrir las necesidades básicas de la casa. Llegué a quedarles mal a mis trabajadores porque no tenía para pagarles lo que les correspondía. Temía que llegara el día de mañana porque sabía que algo iba a faltar.

En el Centro de Ayuda Universal, me di cuenta que la fe trae resultados reales. Conforme me fui entregando a Dios, Él me fue concediendo la realización de mis metas, como ser dueño de mis negocios: hoy tengo tres zapaterías. Fui empleado por 25 años y jamás pensé que esto me pudiera suceder, pero veo que la mano de Dios se extendió en mi favor y en el de mi familia”.

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