¿Por qué el límite de un problema no es el fin?

El obispo Renato Cardoso explicó que el límite de un problema no es el fin, tal y como muchos piensan, sino el inicio de la manifestación del Poder de Dios.

 “Esto es porque el Señor Jesús quitó todos los límites del camino de aquellos que creen en Él, cuando dijo: ‘Al que cree todo le es posible’ (Lea Marcos 9:23)”, comentó el obispo.

Los límites de los profetas

Durante el mensaje, el obispo recordó a personas como Josué, citado en el Antiguo Testamento, y a Jairo, en el Nuevo Testamento, solo para ejemplificar que en todo momento las personas llegan al extremo de una situación, de tal forma que la única solución fue recurrir a Dios.

“Después de un día entero de trabajo, Josué vio el sol ponerse y pensó: ‘Si oscurece, nuestros enemigos tendrán ventaja sobre nosotros’. Entonces, él ordenó que el sol se detuviera y después la luz del sol permaneció más allá del tiempo que debería estar, es decir, él lucho hasta vencer a los enemigos. La fe prolongó aquel día.

Por otro lado, Jairo, cuya hija estaba al borde de la muerte, fue hasta Jesús para buscar la cura para ella, pidiéndole que fuera a su casa. Sus amigos le dijeron que no molestara al Maestro, pues su hija estaba muerta. Parecía que no había más remedio, pero Jesús dijo: ‘No temas, solamente cree’. Jairo experimentó uno de los mayores milagros, su hija regresó de la muerte. Así queda claro que tanto en el Viejo como en el Nuevo Testamento, Dios aparecía en el momento crítico, cuando sus hijos creían en Él”, dijo.

No hay límites para lo imposible

Para usted que llegó al límite de su dolor y dice: “Yo no aguanto más”, asista al Santuario de la Fe, en Av. Revolución núm. 253, Col. Tacubaya, o busque el Centro de Ayuda Universal más cercano a su domicilio. Participe en esta campaña de fe hasta el día 17 de febrero.