Entrelíneas: la importancia del Espíritu Santo

El pasado domingo 4 de noviembre se transmitió en el aire un episodio más de Entrelíneas, en Univer Vídeo. Esta vez, el programa fue presentado por el obispo Edir Macedo, al lado de su esposa, Ester Bezerra; del obispo Renato Cardoso y su esposa, Cristiane Cardoso.

El tema abordado fue el “Espíritu Santo y Su importancia para el ser humano”. Al inicio del programa se exhibió una escena de la novela Jesús (telenovela de Brasil). En el fragmento elegido, el Señor Jesús conversa con una mujer samaritana.

Posteriormente, el obispo Macedo explicó que aquella mujer samaritana era una persona religiosa, que conocía la Palabra de Dios, pero aún no había bebido el Agua Viva que el Señor Jesús le podría dar. “El Espíritu Santo es Jesús en la Tierra, y quien no aprovecha para recibirlo, difícilmente mantendrá la fe en Él antes del arrebatamiento”, comentó.

Para ejemplificar mejor el tema, el programa contó con la participación de Alex Navarra. Él fue invitado especialmente para contar su experiencia con el Espíritu Santo. Según contó, el joven llegó al Templo de Salomón seis meses atrás, sufriendo de cáncer. También reveló que, en el pasado, hizo un pacto con el diablo, lo cual le acarreó una vida bastante desequilibrada.

Conocido en la colonia en la que vivía como “conflictivo”, Alex era temido por donde pasaba. Él recuerda que sentía placer de intimidar a las personas con su apariencia sombría y miradas atemorizantes.

“Yo oía voces, principalmente para golpear a los demás. Llegué a hacer una lista de personas que quería matar, antes de morir. Y nada salía de mi cabeza”, agregó.

A pesar de toda la valentía, en un determinado momento de su vida, Alex se vio en una situación delicada y —confiesa— sintió mucho miedo al ser diagnosticado con leucemia. 33 kilos más delgado y con síntomas de la enfermedad esparcidas en su cuerpo, él decidió aceptar la invitación de su exnovia para buscar ayuda en el Templo de Salomón.

“Recuerdo que llegué con cara de malo, con la cabeza rapada y un tatuaje a la vista. Yo pensaba: ‘caramba, el obispo me está viendo así, qué vergüenza’, pero nadie me miró con otros ojos, al contrario; en 28 días yo ya estaba caminando normal y, al hacerme nuevos exámenes, todo estaba normal”, celebró Alex.

Hoy, Alex está curado y, principalmente, fue bautizado con el Espíritu Santo.

Para el obispo Macedo, el motivo de un cambio tan rápido se dio justamente a causa de la entrega sincera de Alex a Dios. “Muchas personas quieren recibir el Espíritu Santo, dicen que ya hicieron de todo, pero no le entregaron sus vida a Él. Para que usted llegue al fondo del pozo y beba el Agua de la Vida, tiene que bajar del pedestal, inmediatamente, Dios vendrá sobre usted”, orientó.

Para ejemplificar, él citó las enseñanzas de Jesús, descritos en el libro de Mateo capítulo 6, versículo 33.

“Mas buscad primeramente el reino de Dios y Su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.”

“Las personas quieren hacerlo a su manera, justamente lo opuesto de lo que Jesús dijo. Ellas vienen a la iglesia con el enfoque de buscar ‘las cosas que serán añadidas’, y eso es un insulto para Dios. Con ese pensamiento opuesto al de Dios no van hacia adelante”, alertó el obispo.

Y agregó: “El Espíritu Santo es Jesús en el mundo. Así como Él caminaba con Sus discípulos y tenía un cuerpo, hoy Él quiere usar nuestro propio cuerpo para andar con nosotros. Él quiere que seamos Su habitación”, concluyó el obispo.

En caso de que quiera ver el programa completo en portugués (además de los contenidos cristianos disponibles para quienes están suscritos), visite Univer Video para más información.