El Domingo de la Casa del Padre

¿Recuerdas cuando ibas a Su Casa? Tu vida era diferente, había paz, alegría y gratitud. Tu alma descansaba y disfrutabas una vida plena con el Señor Jesús.

Pero la alegría de estar en la Presencia de Dios poco a poco fue dando lugar al distanciamiento. La necesidad de meditar en Su Palabra como guía para la vida ya no parecía tan necesaria. Las oraciones, que antes eran constantes, con el tiempo casi no se estaban haciendo y, cuando se hacían, sonaban como una obligación. El temor de hacer la Voluntad de Dios fue sustituido por el deseo de hacer la propia voluntad.

El tiempo fue pasando, las dificultades fueron apareciendo y las invitaciones y tentaciones de este mundo ganaron tu atención. Tu tiempo para Dios, pasó a ser para amistades que solo te distanciaron de Él.

Cuando te diste cuenta, ya estabas lejos de Su Casa y de Su presencia. Pero en lugar de encontrar la satisfacción que prometía esta vida efímera, solo obtuviste como resultado un vacío profundo en el alma. Y, de repente, ya no te quedaron fuerzas para buscar a Dios.

Si esta es tu condición, este recado es para ti…

Tal vez te has identificado con las palabras de arriba. E incluso estás leyendo este texto sintiendo nostalgia de esos momentos. A lo mejor piensas que por todo lo que has hecho a pesar de conocer la verdad piensas que eres indigno(a) y, por eso, no logras regresar a la Casa del Padre.

Pero ten presente esto: ¡Dios nunca te abandonó! Y prueba de eso es que estás leyendo este mensaje ahora.

Hay una cita que dice que el ahora es un regalo, y por eso se llama presente. Así que hoy puedes tomar la decisión de reconstruir tu vida con Dios.

Te esperamos este 26 de mayo, en la Reunión del Espíritu Santo, especialmente a las 10 a. m., en el Templo de los Milagros: Av. Revolución # 253, col. Tacubaya. O bien en la Universal más cercana.

Las puertas de la Casa del Padre están abiertas, ¡Él está listo para recibirte! Esta oportunidad también es para ti que nunca te habías acercado a Dios, pero reconoces que Lo necesitas en tu vida. Así que no faltes.

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