90 minutos de vida

Los viernes, el programa Pare de Sufrir cuenta con 30 minutos más

El Centro de Ayuda Universal se creó con un solo objetivo: llevar la Palabra de Dios a toda criatura, — tal como lo estipulan las Sagradas Escrituras— para despertar en ellos la fe inteligente y así, dejen en el pasado su historial de sufrimiento.

Alrededor del mundo, millones de personas acuden a la Universal cansadas de una vida de angustia, con problemas que sobrepasan su entendimiento y sus fuerzas. No obstante, sería una labor titánica llegar a cada rincón de la Tierra para ayudarlos sin el uso de la tecnología.

Gracias a la programación de la Iglesia Universal, emitida en diversos canales de televisión, muchos de los que están sufriendo encuentran la solución a sus adversidades, se detienen cuando están a punto de matarse, ven un rayo de esperanza cuando el médico los ha desahuciado, hallan la calma para sus ansiedades y, lo más importante, se enteran de que hay un Dios Vivo esperándolos para darles consuelo, amor y ayudarlos a ponerle fin a sus contrariedades.

Es por medio del programa de televisión que quienes estaban sufriendo conocieron a este Dios, se dieron la oportunidad de buscarlo, usaron su fe, se entregaron a Él y transformaron su realidad de dolor en un caso de éxito. Hoy, ellos son testimonios fieles de que el Señor Jesús sigue haciendo milagros extraordinarios en quienes se atreven a creer.

“El trabajo de la Universal es hecho con sinceridad y pureza, por eso el Espíritu Santo lo conduce de una forma magnífica. Siempre nos hemos preocupado por las personas sufridas, afligidas, por quienes son desechadas por la sociedad; gente que no tiene quien vele por ellas más que el propio Dios.

Es una honra que el Señor haya confiado su obra en nuestras manos, porque nuestra pasión es y será despertar en los sufridos la fe inteligente, por medio de la Palabra que viene de lo Alto, así transformarán sus vidas y el Señor será glorificado, esa es nuestra mayor satisfacción”, aseguró el obispo Edir Macedo.

Si estás angustiando, en un punto límite donde no encuentras una salida; sintoniza nuestro programa donde comprobarás que, personas con la misma historia que tú, salieron adelante. La oportunidad que ellas aprovecharon ahora es tuya. Nos puedes encontrar de lunes a jueves, en el canal 2, poco después de la medianoche y, especialmente los viernes, contamos con 30 minutos más de programación.

O bien, asiste los viernes a nuestra reunión dedicada a combatir los males espirituales y los problemas relacionados con la depresión en Av. Revolución núm. 253, Col. Tacubaya y en cualquier Centro de Ayuda Universal. No estás solo, invoca a este Dios que aún hace milagros extraordinarios y permite que, por tu fe, interceda en tu favor. “Y serán para mí especial tesoro, ha dicho el Señor de los ejércitos…” (Malaquías 3:17).

“Comprobé que todo lo que decían en ese programa era real”

“Me llamaba la atención escuchar los testimonios que mostraban la transformación de las personas”

“Desde los tres años, me tocó vivir el sufrimiento con los problemas que mi familia tenía. Por eso, me casé en cuanto fui mayor de edad.

Solo que en mi casa encontré trabajos de brujería y las peleas y los golpes no tardaron en llegar. Me sentía triste, angustiada, vivía la misma situación que de niña. Creí que encontraría la salida en casas de limpias, pero nada sirvió. Pensaba en morirme junto con mi hijo, de hecho, lo intenté pero mi esposo intervino para que no lo hiciera, ¡estaba desesperada! No podía ni alimentar a mi bebé.

Una noche, vi el programa del Centro de Ayuda Universal; incluso, hacía la oración del vaso con agua, me llamaba la atención escuchar los testimonios que mostraban la transformación de las personas, sentía paz y, aun así, tardé en venir casi un año.

En cuanto tomé la decisión de asistir, comprobé que lo que decían en el programa era real, ya que yo estaba experimentando todo lo que la gente contaba. Poco a poco, con el uso de la fe, tuve un encuentro con Dios y las ganas de morir se me quitaron.

Él cambió mi vida en todos los aspectos”, Jazmín Mora.