725 personas en situaciones vulnerables fueron socorridas por la UEC y la UniSocial

Cuando de solidaridad y amor al prójimo se trata, las distancias y las dificultades no son un impedimento, prueba de esto son los recientes trabajos de la UniSocial y la Universal Evangelización Carcelaria (UEC), quienes en días recientes se han movilizado para socorrer a quienes más lo necesitan.

Por ello, los voluntarios de la UniSocial acuden a colonias de escasos recursos para llevar artículos de primera necesidad como alimentos no perecederos, agua, ropa, medicamentos, entre otros; pues su lema es «quien piensa en el prójimo piensa como Dios», y eso es lo que se vio hace unas semanas en Kanasín, Yucatán, en donde se entregó casi una tonelada de alimentos a 150 personas, así como bolsas de galletas para los pequeños del hogar. Asimismo, se les pasó un mensaje de fe para fortalecerlos.

Desde otro frente, la UEC visita centros de reinserción y readaptación social para llevar esperanza a aquellos que, por los errores del pasado, están privados de su libertad. A sabiendas de que muchos de ellos viven en condiciones de abandono, los integrantes de la UEC les entregan kits de higiene personal, ropa y libros, por mencionar algunas cosas. En esta ocasión, se visitó el Centro de Reinserción Social de Villahermosa, en Tabasco, donando 175 kits, así como cientos de libros con mensajes de fe, a 175 internos. Además, todos los martes se les estará acercando la Palabra de Dios y orando por el bienestar de cada uno de ellos.

Uniendo esfuerzos

El Centro de Readaptación Social de Chilpancingo, en el estado de Guerrero, recibió con los brazos abiertos a 10 voluntarios de la UEC y la UniSocial, quienes les llevaron 400 kits de higiene personal, casi 3 toneladas de alimento y agua, así como medicamentos y ropa, beneficiando a 400 personas en el lugar. Asimismo, se les dijo que sin importar quiénes sean ellos ni lo que hayan hecho, ninguna persona es un caso perdido, basta querer cambiar de vida, pues, aunque los muros del reclusorio limitan quién entra y sale de las instalaciones, nadie puede impedir que el Altísimo entre en la vida de aquellos que lo buscan con sinceridad y de todo corazón.

Sin duda, labores como estas dejan una huella en aquellos que dan y en aquellos que reciben. Si deseas apoyar en esta causa, puedes realizar tus aportaciones en línea haciendo clic aquí, para que la ayuda siga alcanzando más rincones del país. O acude a la Universal más cercana para llevar tu donativo en especie (alimentos no perecederos; agua; zapatos, ropa y cobijas en buen estado; artículos de higiene personal; juguetes y dulces).

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(*) La Universal agradece la colaboración de todas las personas que hacen posible esta labor social con sus donativos voluntarios. Así como a las autoridades y a todos aquellos que nos brindan las facilidades para llevar a cabo este trabajo.