Cura de los Vicios
Algunos especialistas de la psiquiatría aseguran que los vicios son una enfermedad incurable, progresiva y fatal, eso sin contar el caso de que quien padece adicciones no quiera ayuda.
Pero en la Universal no son pocos los testimonios de hombres y mujeres que, después de vivir durante muchos años dependientes de las drogas, el alcohol, la pornografía, los juegos de azar, etc., fueron completamente libres, lograron reconstruir su vida y reescribieron el rumbo de su historia por medio del poder de la fe.
Si tú o un familiar tuyo están luchando contra un problema de adicciones, te invitamos a que participes en la Cura de los Vicios los domingos a las 4 p. m. en el Templo de los Milagros, Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya.
En las sedes estatales, el horario es a las 3 p. m. Solicita más información en nuestra agenda de direcciones.
¿A quién le puede ayudar la cura de los vicios?
Esta reunión es especial para cualquier persona que esté atravesando un problema de adicciones: alcohol, estupefacientes, fármacos, cigarro, sexo, pornografía, juegos de azar, internet, videojuegos, compras compulsivas, trastornos alimenticios, etc.
Pero también este método es para un familiar o amigo dispuesto a extenderle la mano a un ser querido para que sea libre de su adicción.
«Caí en las drogas y tuve ideas de suicidio»
«Desde muy joven comencé a probar bebidas alcohólicas y lo hacía con la finalidad de llenar un vacío interno. Sonreía frente a los demás, pero por detrás de esa falsa alegría había mucha soledad. La adicción se fue volviendo más fuerte, pues salía con amistades a fiestas, pero el alcohol ya no era suficiente; caí también en el vicio de la marihuana y la cocaína. No obstante, la infelicidad me provocó ideas de suicidio. Constantemente discutía con mi mamá y no había nadie que me pudiera controlar. Sin embargo, cuando estaba solo en casa lloraba y, aun sin conocer a Dios, hablaba con Él en secreto, le suplicaba por ayuda porque ya no quería estar viviendo así.
Un compañero de trabajo fue la persona que me presentó la Universal; cuando llegué y me quedé a una reunión, el mensaje que dieron me marcó: hablaban sobre las personas que cargaban el peso del sufrimiento, parecía que estaban describiéndome a mí. No había manera de que alguien ahí supiera de mi situación, pero admití que necesitaba apoyo. Seguí participando en los encuentros y encontré la felicidad que tanto había buscado, la respuesta estaba en recibir la presencia de Dios. A través de mi esfuerzo en cada paso de fe, logré dejar las adicciones; asimismo, el Señor me guio para abrir mi propio negocio. Solamente Dios puede darte una vida transformada.» -Fernando Gordillo
(*) La Universal aclara que todos los conceptos emitidos en este sitio web, así como la programación de radio y de televisión, son cuestiones de fe, en modo alguno deben ser interpretados como elementos con atribuciones terapéuticas, en demérito de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJES DE CONSULTAR A TU MÉDICO.
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