«Vivía de transfusión en transfusión, pero no mejoraba»

La mielofibrosis se considera una enfermedad rara debido a su baja incidencia, con solo 1.5 casos por cada 100 mil habitantes, según introduce un artículo de la revista Acta Médica Grupo Ángeles. Es un tipo de cáncer de la médula ósea que afecta la producción de células sanguíneas, lo cual puede causar una anemia grave (generando debilidad y dificultades para respirar).
Fortino García nos comparte que una vez fue parte de dicha estadística. Todo comenzó con un agotamiento, el cual se fue agravando: «Llegaba a casa y dormía; si daba algunos pasos, de inmediato me cansaba. Poco a poco me empecé a poner pálido y tenía dificultad para respirar».
Después de que le practicaron una prueba se descubrió el problema: «Era mielofibrosis. Me dijeron que mis glóbulos rojos se iban a ir consumiendo. Recibí transfusiones de sangre y sentía que me recuperaba, pero solo durante un mes, porque de nuevo requería otra; así estuve durante 1 año. También me dijeron que ya no podía trabajar porque me iba a ir acabando, no tenía solución, era la muerte».
Inicialmente, cuando escuchaba de la Universal por su mamá, no le interesaba; sin embargo, tras ver el programa en la TV, tuvo el deseo de participar: «Estando ahí, me sentí en paz y me motivé a asistir a las reuniones de los sábados porque, tras escuchar la Palabra de Dios, me sentía fortalecido. Aunque me sentía mal estando en casa, estaba seguro de que por mi fe iba a ser sanado. Con el paso de los meses, sucedieron cosas que solo Dios puede hacer. Tiempo después de seguir la prescripción de un especialista, me dijo que estaba bien. Fue Dios el que hizo el milagro en mi vida. Hoy vivo con mucha alegría y fuerzas. Tras esta experiencia, ahora entiendo que un problema no significa nada para Dios, pero es necesario entregarle nuestro corazón para que Él actúe».
Casos Imposibles
¿Tienes una causa en la justicia sin solución? ¿Te han dicho que para tu situación no hay salida? ¿Los problemas que te rodean parecen imposibles de vencer?
Entonces, participa todos los sábados en la reunión del Ayuno de los Casos Imposibles. Te esperamos en la Universal más cercana a tu domicilio.
Lee también: «Mi dolor resultó ser cáncer»
comentarios