«Vivía acosada por espíritus malignos»

«La brujería formó parte de mi vida y mi familia cuando era pequeña. Desde que recuerdo, mis padres ya asistían a las casas de limpias. Cada que les recomendaban un brujo, ellos iban. Las consecuencias de esas maldiciones provocaron que no encontrara paz.

Me dijeron que tenía un don para dedicarme a eso. Y, después de ir a mi primera sesión, los problemas empeoraron: no salía en las noches cuando empezaba a oscurecer porque sentía que unas sombras me perseguían y me acechaban, que en cualquier momento podrían arrojarme a algún lugar alto o hacia los coches.

Por otro lado, estaba muy enferma del estómago y casi no podía salir. Eso provocó que me hundiera en la depresión, con deseos de suicidarme.

Pero, conocí el Templo de los Milagros. Ahí empecé a luchar por una vida diferente, guiada por el poder del Espíritu Santo. Al escuchar que hay un Dios que puede cambiar mi vida y darme paz, empecé a perseverar junto con mi mamá en las reuniones de viernes y domingo.

De esa manera, todo cambió. Estoy totalmente sanada de mi estómago, ya puedo salir. Tampoco veo sombras ni escucho voces. Incluso vivo sin depresión, pudiendo dormir perfectamente.

Lo más importante es que recibí el Espíritu Santo. A partir de ahí soy libre y llena de paz.» -Beatriz Ramírez

Baño de la Descarga con el Agua de las 7 Iglesias

Así como en el caso de Beatriz, ya sea por pleitos o desesperación, algunas familias recurren a un ritual de brujería. Lo que no saben es que, lejos de hallar una salida, se perjudican más de lo que ya están.

Pero ¿qué dice la Biblia? En 2 Reyes 21: 6-7 está escrito: «…practicó la hechicería y la brujería, y se hizo amigo de los espiritistas y los brujos. […] Su comportamiento fue tan malo, que el Señor se enojó mucho».

La brujería es algo serio y detrás de cada practicante están los espíritus inmundos queriendo destruir la vida de quien se los permite. Es por eso que, quien se involucra con ellos, se hunde cada vez más.

El mal se combate con el bien y solo hay Alguien capaz de vencer a todos los espíritus malignos: el Señor Jesucristo.

Por eso, aprende a usar tu fe para combatir los males y tormentos espirituales. Para luchar desde ese campo:

«Las puertas del infierno no prevalecerán contra la iglesia» (Mateo 16:18)

Como dice arriba, la Iglesia es un lugar santo. Con base en este versículo, el viernes 19 de marzo se entregará Baño de la Descarga con el Agua de las 7 Iglesias.

Para esta ocasión, se mezclará el agua bendita de 7 iglesias de la República Mexicana, para que, por medio de tu fe, el mal que actúa en tu vida sea vencido. Pues «solo el poder de Dios es capaz de arrancar cualquier maldición y dar la verdadera felicidad», afirma el obispo Edir Macedo.

Por eso, no faltes. Al recibir este elemento consagrado se te explicará cómo usarlo.

Participa en la reunión de Viernes de Liberación Espiritual. Consulta los horarios de las reuniones en la Universal más cercana a tu domicilio o llama al 55 55743266.

Y te invitamos a leer el Aviso Importante sobre las reuniones en todo el país para informarte más.