Ventas y fraudes por internet podrían hacerte perder la vida, afirman

El anuncio parece perfecto, el precio es irresistible, pero la realidad puede ser diferente a lo que esperas adquirir. Los noticieros últimamente han informado acerca de los peligros de comprar por internet.

El Consejo Ciudadano de la Ciudad de México alertó sobre una nueva forma de robo y fraude en línea con el mismo modus operandi: publicar productos debajo de su precio normal con la leyenda de «urgente» con pago en efectivo y al momento.

En carros, motocicletas, terrenos e inmuebles, son en lo que más se producen estafas, culminando muchas veces, en la muerte de los vendedores o compradores a mano de personas supuestamente interesadas en la transacción.

«Son varias bandas, en algunas ocasiones muy sofisticadas, que engañan fácilmente a sus víctimas. En otras, son más improvisados, pero están también aquellos que son sumamente violentos e incluso cometen homicidios», explica Salvador Guerrero, director del Consejo Ciudadano local.

La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y la División Científica de la Policía Federal, detectaron algunos sitios apócrifos, con algunos proveedores fuera de México que, aparentemente, suplantan la identidad de las automotrices y prometen la adquisición de bienes inexistentes.

«Hemos emitido varias recomendaciones para evitar que crezca esta modalidad. Pero, como las ofertas son tentadoras, más gente cae. Lo más importante es no creer en ofertas que parecen muy buenas e incluso gangas, pues puede ser una trampa con fatales consecuencias», alertó Guerrero.

«Al quedarme sin negocio y solo, pensé en morirme»

Mi principal problema estaba en el área familiar. Si bien tenía una buena posición económica, trabajo, buenos ingresos y monté mi empresa, con el tiempo esta se vino abajo por falta de dinero, hasta que me vi en la necesidad de cerrarla.

A raíz de esto, la falta de comunicación menguó mi matrimonio y me divorcié. No poder ver a mi hijo era lo que más me dolía. Espiritualmente estaba mal: aunque de noche al acostarme veía sombras, empecé a escuchar voces y a padecer insomnio.

No me servía de nada estar titulado si no tenía algo que valiera la pena. Al quedarme sin negocio, familia, paz, tranquilidad y felicidad, pensé en morirme. 

Afortunadamente encontré la salida correcta, pues al asistir al Templo de los Milagros, mi interior cambió. Cuando regresé a mi casa, dormí sin problemas y sin miedo. Así empecé a enfocarme en Dios y en usar la fe para lograr mis metas.

Laboralmente, decidí capacitarme en un área que me encanta y que me ha dejado muchas satisfacciones para superarme.

Desde que Dios se convirtió en mi socio, los resultados han sido grandiosos y no paran las bendiciones.

En el amor, me unió a una excelente mujer con la que formé una bonita familia, me entiendo muy bien con ella y me siento pleno, feliz, porque ambos estamos cerca de Él.

Ahora mi vida sí tiene sentido.» -Alejandro Medina