Trabajos de dominio, no son un juego

Entre la desesperación y la maldad, muchas personas recurren a la brujería para realizar trabajos de dominación.

¿Qué es lo que hace?

Básicamente, este trabajo lo que pretende hacer es manipular las actitudes de las personas, conforme a la voluntad o interés de aquel es el «dominador», pues la otra persona queda sujeta a sus deseos.

Esto se puede ver cuando algunos, por ejemplo, quieren separarse de su novia(o), pero no pueden, incluso pueden ir decididos a terminar la relación, pero al llegar con la otra persona, se paralizan. Pues estos trabajos de brujería están hechos para que se ejerza total control sobre el otro.

Este tipo de «trabajos» no son realizados únicamente entre parejas, sino que puede ser hacia cualquier persona que, aquel que está solicitando el trabajo, desee. Así, sin saberlo muchos podrían estar bajo el dominio del mal que la brujería desata.

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Algunos justifican este tipo de trabajos bajo el pretexto de que no tienen por qué aguantar situaciones a sus ojos «injustas», como puede ser el ascenso de otro compañero de trabajo, un hijo que decide independizarse, o un amante que quiere terminar.

Sin embargo, este tipo de brujería abre puertas para el actuar del mal, no solo para la persona que es sometida, sino también para aquel que solicita el trabajo.

Viernes de Liberación Espiritual

¿Sospechas que eres víctima de un trabajo de brujería, o incluso acudiste a un brujo en medio de la desesperación?

Este viernes 25 de noviembre, te esperamos en la reunión de Liberación Espiritual, en donde podrás determinar, a través de tu fe, ser libre de toda obra del mal.

En este encuentro, se estará repartiendo un poco de agua del mar muerto. El propósito de entregar esta agua traída desde Israel es que, por la fe, a través de su uso, puedas limpiar tu vida de aquellos males espirituales que han estado quitándote la paz en todas las áreas de tu vida.

Participa con nosotros en Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya, Ciudad de México. Especialmente a las 3 p. m. o 7 p. m.

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