Sombras extrañas en las noches: ¿enfermedad o actividad paranormal?

Uno de los fenómenos más conocidos por las personas que sufren parálisis del sueño o que notan cosas extrañas en las noches es ver sombras.

En el ámbito popular, se acuñó un término para referirse a estas entidades: gente sombra. Algunos creen que se trata del alma de personas perturbadas por su muerte. En cambio, otros no creen que realmente sean personas, sino sombras del inframundo (demonios).

Desde la perspectiva científica, se trata de un efecto provocado por varias enfermedades fisiológicas y psicológicas. No obstante, también es generado por el uso de drogas como la cocaína y las anfetaminas. Incluso puede llegar a ser efecto secundario de los medicamentos.

Como parte de las sensaciones de las personas que tienen esta clase de visiones también se encuentran escuchar vidrios o vajilla rompiéndose, voces, golpes de puerta, muebles arrastrándose, viento, música extraña, que alguien las asfixia, etc.

De acuerdo con el obispo Edir Macedo, entre las señales de una posesión maligna se encuentra ver sombras o escuchar voces. Este es el motivo por el cual vemos a tantas personas hablando solas, gritando incontrolablemente, enfermas con un mal que los profesionales médicos no pueden encontrar, viviendo en la miseria, no tienen un hogar para vivir o no consiguen mantenerse estables en un lugar.

Medita en: El sello de la diferencia

«Pensé que un amuleto iba a cambiar mi vida»

«Mi hermana me invitó a ir con un brujo, me dijo que él me daría un amuleto, pues yo no tenía trabajo y mi vida sentimental no avanzaba. Por un instante tuve la esperanza de que recurriendo a esas prácticas mi vida cambiaría, pero pasó todo lo contrario: vinieron más problemas, seguí buscando empleo y no encontraba, la situación era complicada. Yo ya no tenía recursos para salir adelante, además, había problemas y discusiones con mi esposa. En una ocasión llegó a lanzarme un frasco de café.

No había la comunión ni la paz que debe existir en una familia. Aunado a todo eso yo tenía el vicio del alcohol. No me emborrachaba seguido, pero los fines de semana llegaba tarde a mi casa por quedarme a tomar. Internamente me sentía desanimado, por momentos no tenía ni fuerza para cumplir con lo que tenía qué hacer, vivía muy desdichado.

Conocí el Templo de los Milagros gracias a una persona que me invitó y me dijo que ella había sido sanada, que había una diferencia. Fue así como decidí también buscar esa ayuda. El primer día salí con paz, feliz, ya no tenía esa carga. Cambié mi forma de pensar. Seguí participando los viernes y domingos. Actualmente estoy liberado del problema del vicio del alcohol. En cuanto a mi matrimonio, ya no hay peleas con mi esposa, debido a que tenemos comunicación.

Además, mi economía está restaurada, mi esposa y yo tenemos trabajo. Soy muy bendecido gracias a Dios, el Espíritu Santo nos ha dado un cambio muy grande en nuestra vida. Me siento en paz y sé que hay proyectos que aún se van a dar.» – Cruz Pérez

Mientras la persona que es víctima de estos ataques no busque la ayuda en el Señor Jesús, el sufrimiento espiritual no cesará.

El diablo sólo vino para destruir, matar y mentirle a toda la humanidad, pero el Señor Jesús vino para dar vida y vida con abundancia. Pero, la persona es quien tiene que tomar la decisión para alcanzar la felicidad y transformación de vida.

Por eso, si eres víctima de este tormento, ves sombras en las noches, encontraste un trabajo de brujería, de la noche a la mañana han surgido una serie de problemas en tu economía, familia o salud y empezaste una mala racha, te extendemos esta invitación.

Cada semana la Universal lleva a cabo la reunión de Viernes de Liberación Espiritual. Te esperamos, en el Templo de los Milagros que se ubica en Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya o en la dirección más cercana a tu domicilio, y recibe orientación.

Es por medio de tu fe que puedes ser libre de esta clase de mal.

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(*) La asistencia espiritual no sustituye los cuidados médicos. Será el tipo de trastorno, su origen y el modo de ser de la persona los que configurarán la manera de orientar, en cada caso.