«Sentía que no había nada que pudiera doblegarme» 

«Era muy prepotente, orgulloso, y además le era infiel a mi esposa. Asimismo, llegué a portar armas, drogas e incluso hice un pacto con un ente maligno, marqué mi piel para, “supuestamente”, salir adelante y que hubiera salud; pero la realidad era que me encontraba completamente destruido en cada área de mi vida. Conocí la Universal por mi esposa, ella estaba enferma, además, se enteró de mi infidelidad. Yo no quería perder el matrimonio, así que me invitó a ir. Al principio acudía, pero solo iba “de paseo” y no prestaba atención a lo que decían. Sin embargo, poco a poco mi corazón se doblegó, llegó el momento en el que entendí que necesitaba a Dios. 

Luego de sacrificar mi prepotencia y orgullo, me esforcé y usé la fe para ser diferente, paulatinamente todo empezó a ser distinto: tenía paz, tranquilidad, dejé lo que le desagradaba a Dios, dejé la infidelidad y mi esposa y yo nos unimos, nuestra relación es de mucha confianza. Por otra parte, al entregarnos por completo, Dios no nos dejó sin sustento durante la temporada de la pandemia, en los negocios nos va muy bien, se nos abrieron las puertas como comerciantes. Él no falla, es verdadero, fue lo mejor que me pudo pasar, Su Presencia nos da tranquilidad y no hay nada que se le compare.» -Sebastián Uruzquieta 

Reunión del Espíritu Santo

Todos los domingos en la Universal se lleva a cabo un encuentro especial para aquellas personas que desean ser guiadas por el Espíritu Santo, el único que puede dar paz, armonía y fortaleza en todos los sentidos.

Entonces, si te has sentido vacío, triste, sin ganas de vivir o en tu familia se ha acabado el amor, la comprensión y la tranquilidad, esta reunión es para ti.

¡No esperes más tiempo! Permite que el propio Espíritu de Dios more en tu hogar y, sobre todo, en tu interior. Te esperamos en la sede más cercana.