«Nos ha ido mal porque no hay trabajo»

T-Ayudo distribuyó despensas en una de las alcaldías más golpeadas por la COVID-19, en la CDMX

El cubrebocas no escondió la preocupación en su rostro. Y es que, como era de esperarse, la pandemia empeoró su condición, pues algunos integrantes de las diversas familias se quedaron sin empleo, razón que los llevó a buscar alternativas para generar ingresos y subsistir, como vender dulces —honradamente— afuera de sus casas hechas, mayormente, de lámina, madera y cartón.

Este es el panorama y la situación con que se toparon los voluntarios del grupo T-Ayudo cuando arribaron a la llamada «Colonia Perdida», en Tlalpan. Cabe mencionar que, hasta el 13 de enero del año en curso, esta alcaldía registró 34 987 casos de contagio por la COVID-19, posicionándola entre las cuatro principales con esta problemática, según la información proporcionada por el Gobierno Federal.

«Nos ha ido mal porque no hay trabajo, no hay nada. Mi hijo y yo salimos a vender dulcecitos, pero también las ventas están muy bajas», contó una de las habitantes al ser entrevistada. La mayoría de las personas de dicho lugar se dedican a la albañilería, jardinería o pintura y, evidentemente, la situación actual les ha afectado en gran manera.

De casa en casa, el equipo de T-Ayudo repartió las despensas elaboradas con la aportación que cada miembro de la Universal, no solo en la Ciudad de México, sino en todo el país, continúa haciendo como una manera de compartir lo que Dios les ha dado. «Debido a que el semáforo aún se encuentra en rojo, nuestras iglesias están cerradas para hacer reuniones, pero abiertas para la recolección de alimentos y asistencia espiritual, siguiendo los protocolos de salud y sana distancia», indicó el pastor que coordinó esta labor.

«Estoy muy contenta con ustedes, porque nos ayudan. Que Dios los bendiga y los acompañe», añadió la habitante antes mencionada.

Esto es solo un poco de lo mucho que se puede hacer por quienes necesitan una mano amiga en estos momentos. La donación de alimentos no perecederos, juguetes, ropa, etcétera, representa una lágrima menos en el corazón de personas que hoy sufren por no tener lo más básico para sobrevivir.

Si deseas ser parte de este lindo trabajo, ingresa a las redes sociales de la Universal, ve a la sección Sé un patrocinador de la obra de Dios en esta página de internet o llama al 55 5574 3266 para obtener mayor información.