De la fe, nadie se enfría de la nada, sino por falta de algo
Muchas personas están sin iglesia. Ellas creen en Jesús, pero no están en ninguna iglesia. «Son cristianas apartadas y están frías, mientras que otras están tibias. Y hay quienes hacen la Obra de Dios y son leales, fieles a su trabajo y dedicadas a la predicación del Evangelio», explica el obispo Edir Macedo.
En Apocalipsis 2:2-3 está escrito que Jesús envía un mensaje para la Iglesia de Éfeso: «Yo conozco tus obras, tu fatiga y tu perseverancia, y que no puedes soportar a los malos, y has sometido a prueba a los que se dicen ser apóstoles y no lo son, y los has hallado mentirosos. Tienes perseverancia, y has sufrido por mi nombre y no has desmayado».
Con base en lo anterior, el obispo enseña que aquí el mensaje se dirige a los que sirven a Dios y elogia el trabajo de ellos de ganar almas. Pero lo que llama la atención de esta carta es que el propio Señor Jesús dice en el versículo 4:
«Pero tengo esto contra ti: que has dejado tu primer amor».
«Él señala con el dedo la herida de muchos de los que están haciendo la Obra de Dios, predicando Su Palabra, sin cansarse ni cesar, y que se olvidaron de su relación con el Señor Jesús. Y ahí está el peligro: hoy, muchos que también ya trabajaron incansablemente por la Obra de Dios, se enfriaron en la fe con el paso del tiempo, al punto de dejar el primer amor», agregó.
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Es necesario entender que la persona no se enfría de la nada, sino por la falta de intimidad con Dios. En Marcos 8:36 está escrito: «Pues, ¿de qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero y perder su alma?». Es decir, no sirve de nada hacer la Obra de Dios sin ser la Obra de Dios: primero es necesario ser para, así, hacer.
Escuela de la Fe Inteligente
Uno de los objetivos de la reunión de la Escuela de la Fe Inteligente es ayudar a quienes un día se alejaron de la fe para reencontrar el camino. También orienta a quienes no se han alejado, pero quizá están a punto de hacerlo. Y previene a los demás para evitar caer.
Este encuentro se realiza estratégicamente los miércoles para renovar las fuerzas y, así, enfrentar las luchas espirituales que se presentan día a día. Es un espacio para aprender más sobre la Palabra de Dios y busques la presencia del Espíritu Santo. Así que no faltes.
Te esperamos este 3 de noviembre en la Universal más cercana a tu domicilio, o bien, en el Templo de los Milagros que se ubica en Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya.
Medita en: Señor, ¿cómo saber el camino?
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