«Me conocían por fiestera, pero yo gritaba por dentro» 

«Además de las discusiones de mis padres, lo que me hundió más en la depresión fueron los problemas en el amor. Fue a través de un novio que probé la marihuana, el tabaco y el alcohol. 

Lo mío era tomar de lunes a viernes, no importaba si era en la noche, mañana o tarde. A pesar de que terminaba inconsciente y con congestiones alcohólicas, seguía en ese ambiente para sentirme contenta. Sin embargo, al pasar el efecto, me sentía sucia. Aunque mis amigos me conocían como la fiestera y hasta me decían: “Borracha, ¿qué vamos a armar este fin de semana?”, no sabían que tenía ganas de acabar con mi vida y gritarle a todo el mundo que necesitaba ayuda. 

Me acerqué a la Universal por invitación de mi mamá, pero iba a burlarme. Solo que escuchando los mensajes de cada reunión entendí que nada iba a sanar mi interior, solo el Espíritu Santo. Fue difícil entregarle mi vida a Dios porque provenía de un mundo que me dejó lastimada. Aun así, con cada paso que daba con fe, mi dolor fue sanando. Noté que podía dormir tranquila y que no necesitaba más aquellas sustancias. Cuando finalmente recibí Su presencia, mi carácter, mi forma de pensar, mi comportamiento y mi visión cambiaron. Empecé a estudiar más y la relación con mis papás es otra. Él me dio una alegría y paz que nunca nadie me había dado. Cuando uno pone su confianza total en Dios, Él no defrauda por nada.» -Perla López 

Cura de los vicios

Esta reunión es especial para cualquier persona que esté atravesando un problema de adicciones: alcohol, cigarro, pornografía, juegos de azar, internet, videojuegos, compras compulsivas, trastornos alimenticios, etc.

Pero también este método es para un familiar o amigo dispuesto a extenderle la mano a un ser querido para que sea libre de su adicción.

Te invitamos a que participes en la Cura de los Vicios los domingos a las 4 p. m. en el Templo de los Milagros, Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya.

En las sedes estatales, el horario es a las 3 p. m. Solicita más información en nuestra agenda de direcciones.