Más de 17 mil parejas en el mundo sellaron su pacto de amor en la Celebración de Matrimonios 2025

El 1.° de mayo fue un día muy esperado por miles de parejas de México y otros 58 países, que intercambiaron sus votos de amor en la gran Celebración de Matrimonios 2025. Cada unión se aceptó legítimamente ante Dios y los hombres para amarse, honrarse y ser fieles en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y la pobreza, hasta que la muerte los separe, conforme al mandato del Señor.
La Celebración de Matrimonios 2025 en cifras:
- Más de 17 mil parejas se casaron en todo el mundo.
- 15 446 parejas celebraron su boda en Brasil; de las cuales, 235 estuvieron en el Templo de Salomón.
- La Celebración también se realizó en 58 países, con 2170 parejas participantes; de las cuales, más 230 fueron de México.
Simultáneamente, en varios puntos de la República Mexicana se llevaron a cabo ceremonias similares, buscando la bendición de Dios. En la capital del país, el evento se llevó a cabo en la sede nacional, en la colonia Tacubaya, ministrado por el obispo Franklin Sanches, quien junto con su esposa, Rachel Sanches, compartieron mensajes especiales tanto para los novios como para los invitados.
El obispo explicó que para que un matrimonio funcione hay 2 principios esenciales.
Primero, tener al Señor Jesús como la base de la relación. «Entre su pareja y usted no deben estar los hijos, los padres, los amigos, el trabajo, el dinero. Cualquier cosa o persona que esté entre los 2 da como resultado la separación. La única persona que puede estar entre ustedes es Jesús; Él es el lazo que une de tal manera que ya no hay modo que pueda separarlos, incluso ante las adversidades que pasen», destacó.
Segundo, señaló que es indispensable el sacrificio. «Si no está dispuesto a sacrificar su voluntad en función de la otra persona, y viceversa, uno estará imponiéndose al otro. Si quiere ser feliz en su matrimonio, tiene que sacrificar todos los días; no hay otra manera».
La Sra. Rachel Sanches, dirigiéndose a las mujeres, enfatizó la importancia de hacer el bien al marido, incluso en las dificultades: «Habrá días difíciles […]. Entonces, cuando usted viva ese día, acuérdese de lo que está escrito en la Palabra de Dios, haga el bien para su esposo y así recibirá lo mejor de él».
El obispo cerró el mensaje recordando que el matrimonio no es solo una ceremonia: «Para Dios, el matrimonio es lo más importante […]. Esta unión es un pacto y Él es el testigo de esta unión», afirmó, advirtiendo que quien le falla a su cónyuge también le falla al Señor.
Posteriormente, las parejas fueron invitadas a acercarse al Altar, donde el obispo oró por ellas. Luego, intercambiaron sus votos de amor y los anillos —símbolos del pacto—. Al final, también se dio un mensaje para los solteros y se bendijo su vida amorosa.
Cada año, la Universal organiza esta celebración para brindarle a las parejas la oportunidad de formalizar su relación. Si te perdiste esta ocasión, próximamente puede ser tu momento.
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