La verdad sobre la marihuana

Esta droga da pie para el consumo a otras drogas

Es la droga de entrada para el consumo de otras drogas. Barata y de fácil acceso, su uso continuo interfiere en el aprendizaje, la memoria y la fertilidad. Es una combinación de flores y hojas de una planta conocida como Cannabis sativa, y puede ser verde, marrón o gris.

Causa enrojecimiento en los ojos, boca seca, taquicardia; angustia y miedo para unos, calma y relajamiento para otros.

Al ser un vicio mundial, la mariguana se usa comiéndola, masticando, fumando, aspirándola… En México, es la más usada y su empleo es más común bajo la forma de “cigarros”, que tiene varios nombres como: mota, mary jane, chora, yesca, coffe, alfalfa, de la verde, flor de Juana, juanita, orégano, pasto, tronadora… Hay pipas especiales para fumadores y, en algunos países, son conocidos como narguilé o pipa de cristal.

Exista un tipo de pipa que filtra el humo con agua, que es conocido en inglés como “bong”. Algunas personas mezclan la marihuana con la comida y también es usada en forma de té.

La marihuana es considerada un alucinógeno, es decir, hace que el cerebro funcione de manera desconcertante y fuera de lo normal, y su principio activo es el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC). El THC produce vario efectos: enrojecimiento de la conjuntiva de los ojos (ojos inyectados de sangre), reducción de la inmunidad por la caída de los glóbulos blancos, sinusitis crónica, faringitis, constricción de las vías respiratorias. Además, afecta el equilibrio, los movimientos y la memoria. La potencia de la droga es medida de acuerdo con la cantidad promedio de THC encontradas en las muestras de marihuana confiscadas por las agencias de la policía.

La marihuana común contiene un promedio de 3% de THC.

La variedad “sinsemilla” (que solo contiene botones y las flores de la planta femenina) tiene un promedio de 7.5% de THC, pero puede llegar a tener hasta 24%.

El hachís (la resina gomosa de las flores de las plantas femeninas) tienen un promedio de 3.6%, pero puede llegar a tener hasta 28%.

La marihuana producida por hidroponía puede tener hasta 35% de THC.

El aceite de hachís, un líquido resinoso y espeso que se destila del hachís, tiene en promedio 16% de THC, pero puede llegar incluso hasta 43%.

No genera dependencia física, sino psicológica. Dependiendo de la personalidad del usuario, puede ser brutal; después de que es retirada inmediatamente, la salud no correrá ningún riesgo, sin embargo, la fuerza de voluntad del paciente tiene que ser grande, exactamente para vencer su necesidad psicológicamente de buscar la marihuana.

Cura de los Vicios

¿A pesar de los esfuerzos que ha realizado, no logra abandonar la marihuana?

No son pocos los testimonios que han demostrado que un método ha surtido efecto en sus vidas, liberándolos definitivamente, por medio de su fe, de ese gran mal. Si usted está viviendo el problema o uno de sus seres queridos está en esa condición y ya no puede más, entonces, es el momento de vencer la adicción que los está destruyendo.

Todos los domingos se realiza la reunión de la Cura de los Vicios, donde pueden brindarle una orientación especial. Siempre se lleva a cabo en el Templo de los Milagros, a las 3 p. m., en Av. Revolución núm. 253, Col. Tacubaya, CDMX. Para mayores informes, acuda a la Universal más cercana a usted. La entrada es libre y sin costo.

(*) La asistencia espiritual no sustituye los cuidados médicos. Será el tipo de trastorno, su origen y el modo de ser de la persona los que configurarán la manera de orientar, en cada caso.

Fuente:

–Cómo actúan las drogas, Gesina L. Longenecker,PH.D. Quark books. Ilustrações de Nelson W. Hee