Integrantes de la Casa Hogar DAYA recibieron a T-Ayudo
La parábola del buen samaritano, en Lucas 10:25-37, explica que unos ladrones despojaron de sus pertenencias a un hombre y lo golpearon dejándolo medio muerto. Dos personas que se dedicaban a hablar del amor de Dios, pasaron a su lado sin ayudarlo. Sin embargo, la tercera, que a ojos humanos no tendría razón o posibilidad de hacerlo, fue quien le extendió la mano.
Este versículo explica, a grandes rasgos, el trabajo que constantemente realiza T-Ayudo: ir en búsqueda del necesitado, física y espiritualmente, para ofrecer su apoyo. Esta vez, las integrantes de la Casa Hogar DAYA fueron el objetivo, pues recibieron una grata visita de esta organización para recibir una donación de útiles escolares que los mismos voluntarios recaudaron.
El evento tuvo un momento de reflexión para las presentes, que consistió en una palabra de fe y varias oraciones a su favor. Una vez que culminó, se divirtieron con un karaoke y, al final, a las administradoras se les regaló un disco con canciones que fortalecerán su espíritu.
A veces, cuando pasamos momentos críticos en la vida, la ayuda viene de donde menos la esperamos. Sé uno de los corazones generosos que pintan sonrisas alrededor del país junto a T-Ayudo. Si así lo deseas, acércate a cualquier Universal para pedir informes sobre cómo contribuir con este lindo trabajo.
“La Universal agradece la colaboración de todas las personas que hacen posible esta labor social con sus donativos voluntarios. Así como a las autoridades y a todos aquellos que nos brindan las facilidades para llevar a cabo este trabajo”.
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