Hijo de tigre, ¿pintito?

Hay un dicho popular que dice: «hijo de tigre, pintito». Pero ¿es esto cierto?

La imagen general

Cuando el hijo se parece a su padre, pronto aparece alguien para decir este refrán. Solo que no siempre. A veces, en realidad, el hijo de un tigre puede ser un escorpión. Y el hijo de un escorpión también puede ser un tigre.

Si tienes hijos rebeldes y problemáticos, quizás te preguntas: ¿en qué me equivoqué? Sin embargo, los hijos no siempre seguirán el buen ejemplo de sus padres. Así como hay hijos que no siguen los malos ejemplos de sus padres.

Solo para ilustrar, solo mira la relación de Dios con las personas. Él es un Padre perfecto y la humanidad es una creación que salió de Él. Pero aun así, hay personas que eligen el mal.

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No es culpa de Dios. Y es importante que tú, una madre o un padre que hizo lo mejor que pudo (con lo que supo y pudo, pero aun así sus hijos tomaron el camino equivocado), no se culpe por eso.

Para agravar aún más la situación, en la escuela los niños entran en contacto con otras personas que pueden influir en ellos de manera equivocada.

Escríbelo:

A pesar de nuestras faltas, de nuestros errores, Dios puede obrar y transformar a los que creen, a los que interceden, a los que buscan, que confían en Dios. En la Universal se han visto innumerables casos de padres y madres que a través de la fe transformaron a sus hijos. Entonces, no puedes entregar a tus hijos al destino y decir: «esto no tiene remedio». No sentencies a tu hijo como un perdido; y ni siquiera condenarte a sí mismo como un mal padre o una mala madre.

Así que, si estás pasando por problemas familiares, vencerás a través del Altar, llevando tu situación a Dios a través de la fe y la oración. Dios, como Padre, sabe por lo que estás pasando y te escuchará.

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