Generación de cristal: ¿qué hacer para no educar hijos frágiles como el cristal?
Cada vez más difícil comunicarse porque las personas son cada vez más sensibles.
Para entender la personalidad y el comportamiento de alguien, se debe tener en cuenta la relación que tuvo con los padres en la infancia y la adolescencia. Ya que ellos tienen una participación fundamental en la construcción del carácter y la personalidad del hijo.
«Hay una generación de jóvenes que cuestionan, argumentan y están llenos de opiniones sobre todo. Esa es la generación que nosotros vemos hoy. Pero, por otro lado, también es una generación de jóvenes frágiles, sensibles. Principalmente con respecto a la exigencia de la vida adulta. No debemos generalizar, pero debemos estar atentos a esa generación extremadamente sensible a las frustraciones, críticas y exigencias», señala Neia Dutra, psicóloga.
3 errores que llevan a los padres a educar hijos frágiles como el cristal
1. Sobreprotección
Los padres sobreprotegen a esos hijos. Es importante darle protección a tu hijo, eso es imprescindible, es nuestro papel. Pero sobreproteger es recorrer el camino del hijo anticipadamente. Es aquel padre, aquella madre que va adelante de tu hijo, limpiando todos los obstáculos, para que él no tropiece en nada, resolviendo todos sus problemas. Ese tipo de postura le quita autonomía al niño y le impide crecer y madurar.
2. Egocentrismo
Muchos padres educan a un hijo haciéndolo sentir único, especial y con derechos y privilegios sobre los demás. Esto es un problema, porque harás que él piense que no necesita esforzarse para conseguir algo. Así, cuando se vuelva adulto, se va a frustrar al depararse con un mundo hostil y amenazador.
3. Inseguridad y catástrofe
El niño «cristal» está acostumbrado a un ambiente controlado por los padres, entonces, cuando algo sale mal, lo enfrenta como una catástrofe. Por no haber desarrollado la habilidad de lidiar con sus propios problemas, se siente inseguro y con miedo.
Para la psicóloga, ese exceso de protección demuestra la falta de confianza en Dios.
«Si usted ora para que Dios proteja a su hijo, entonces, tiene que creer que Él lo está protegiendo. Si usted ora para que Dios lo libre del mal, tiene que creer que Él lo está librando. En fin, cuando oro por mi hijo, tengo que creer que Dios está trabajando en su vida, aunque yo no lo esté viendo. Pero mi fe me hace confiar», dijo.
Entonces, ¿qué hacer para no criar hijos frágiles como un cristal?
1. Dale a tu hijo la protección necesaria: Pero permite que él resuelva cuestiones compatibles con su edad. Déjalo desarrollar su autonomía para cuidar su propia vida.
2. Valora a tu hijo: Necesitas valorar a tu hijo, no sobrevalorarlo. Él necesita saber que es importante para Dios y para ti. Pero deja claro que eso no le da ventaja o derecho especial sobre los demás.
3. No seas el superhéroe de tu hijo: Evita resolver todos los problemas de tu hijo. No le des la solución pronta a él, en lugar de eso, ayúdalo a encontrar la solución. Claro, siempre y cuando el problema sea compatible con su edad.
4. Y si tu hijo ya es un cristal, ¿qué hacer? Aplica estas enseñanzas y es mejor que sepas que tendrás que ser perseverante, ya que él esta condicionado a ser tratado como un cristal. «Protege sin sobreproteger, valora sin sobrevalorar. Deja que él resuelva sus cuestiones, a fin de que tenga autonomía y crezca como un adulto fuerte, capaz de resolver sus propios problemas», enseña la psicóloga.
5. Permite que tu hijo sea moldeado por Dios: No quieras salvarlo de los problemas inherentes a la vida humana. Si es el caso, déjalo pasar por algunos apuros, eso lo ayudará a madurar. Estimúlalo a orar, a recorrer y depender de Dios.
Para saber más sobre cómo educar a tu hijo, sigue la página de Facebook e Instagram de la Escuela Para Madres y participa en las clases mensuales.
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