¿Existe la cura para la insuficiencia cardiaca?

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) mostró que, en el 2015, más de 88 mil personas murieron a causa de enfermedades del corazón y una muy común es la insuficiencia cardiaca.

En cuanto a la cura, no es posible revertir todas las afecciones que provocan la insuficiencia cardíaca,pero los tratamientos pueden mejorar los signos y síntomas y ayudarte a vivir más tiempo, explica la Clínica. También indica que si cualquiera de los síntomas empeora de manera repentina o presentas un nuevo signo o síntoma,puede significar que la insuficiencia cardíaca está empeorando o no responde al tratamiento.

Según la Clínica Mayo, la enfermedad se produce cuando el músculo del corazón no bombea sangre de forma correcta. Dicha afección puede ser crónica o aguda. En tal caso, los síntomas son:

• Falta de aire al hacer esfuerzos o acostarse, ofalta de aire repentina y grave

• Debilidad

• Latidos del corazón irregulares

• Hinchazón en las piernas, tobillos, pies y/oabdomen

• Tos con flema blanca o rosa

• Aumento de peso

• Falta de apetito y nauseas

• Dolor en el pecho

Pero ¿acaso todo terminó? No,cientos de personas han logrado vencer enfermedades incurables a través delpoder de la fe, logrando que el milagro de sanidad sea una realidad en susvidas. Y puedes lograrlo si tu fe se arraiga en el Médico de los médicos: Dios.

Cada martes, 70 hombres y mujeresde Dios clamarán en pro de tu sanidad. Participa, el servicio es gratuito y laspuertas están abiertas, no importa tu religión o creencia.

“Los médicos me dijeron que podía morir en cualquier momento”

“Duré 5 años con insuficiencia cardiaca, fibromialgia y rinitis alérgica. Los médicos me hacían estudios y me daban medicamentos, los cuales tomé sin resultado alguno.

Es una decepción y desesperación saber que el medicamento no hace nada. Te da depresión por sentirte enfermo y gastar demasiado. Me pusieron un monitor Holter para checar mi frecuencia cardiaca, sin embargo, esta seguía siendo baja. Los médicos me decían que podía morir en cualquier momento.

Les decía a mis hermanos que cuidaran a mis hijos pequeños porque no me sentía con la fuerza para seguir adelante. Pero ellos me dijeron: “Lucha, tú puedes, tus hijos te necesitan”. Fue cuando llegué a la Universal y participé en la Oración de los 70.

Perseverando y por mi fe, elresultado fue que me sané, no he vuelto a tomar ningún solo medicamento. Ahorapuedo caminar, no me siento con cansancio, debilidad o que pierdo elequilibrio.

Hoy estoy feliz y contenta. Los invito a participar en la reunión y que no duden de nada, no se van a arrepentir”, Aurelia.

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