¿Eres un cristiano tibio?

¿Qué es un cristiano caliente, tibio y frío, como muestran las Sagradas Escrituras?

«Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.» (Apocalipsis 3:15-17)

Al respecto, el obispo Edir Macedo explicó que las personas tibias y frías sienten envidia de aquellas que son calientes, esto es, de las que están en la fe. Por eso, aconsejó que el verdadero cristiano se aparte de las personas que son tibias y frías adentro de la iglesia, porque ellas son «contagiosas».

No obstante, para que una persona logre identificar a quienes son fríos y tibios, debe contar con la ayuda del Espíritu del Altísimo. Quien no lo tiene, no resistirá. Acabará muriendo espiritualmente.

Ahora bien, se puede identificar a una persona caliente porque «transmite espíritu» (vida), y este convence a quienes conversan con ella. Es una persona que busca dar lo que tiene, pues es una fuente de Agua Viva.