Domingo 27 de marzo: Dios te extiende esta invitación

El Señor conoce el dolor del desprecio. Él entiende quién está pasando por el rechazo. Si estás enfrentando esta situación, no olvides que Él vivió eso en carne propia.

Cuando el Hijo de Dios fue sacrificado, la Biblia lo describió de la siguiente manera: «Fue despreciado y desechado de los hombres, varón de dolores y experimentado en aflicción; y como uno de quien los hombres esconden el rostro, fue despreciado, y no le estimamos.»  (Isaías 53:3).

Hoy, ¿cuántas personas viven avergonzadas de pedir por lo menos un peso, un poco de ayuda, porque están en la quiebra, están endeudados, pasando necesidad y tienen vergüenza de la vida que han llevado, tienen vergüenza de que otros se enteren de cuán hundidas están?

Te puede interesar: ¡O da o desciende!

No obstante, Dios tiene el poder para transformar todas las cosas. Por eso, esta es una oportunidad para aquellos que creen en el poder del Altísimo.

A diferencia de lo que muchos suelen hacer, Dios no se avergüenza de ti, Él te está extendiendo la mano a través de esta invitación. Entonces, todos los que están siendo rechazados, despreciados, dejados a un lado, aquellos en quienes nadie más cree, tienen la oportunidad de cambiar todo y volverse una nueva criatura.

Por eso, este domingo 27 de marzo, no faltes en la Reunión del Espíritu Santo, para tomar esta oportunidad. Te esperamos especialmente a las 10 a. m. en el Templo de los Milagros: Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya.

O bien, acude a la dirección de la Universal más cerca de ti, no olvides consultar los horarios de las reuniones.

Sigue leyendo: ¿Quién escuchó?