Confianza es…
«Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo; tu vara y tu cayado me infunden aliento» (Salmo 23:4).
Incluso… si perdemos o sufrimos, asimismo no temeremos.
Cuando usted no teme, no deja de hacer la voluntad de Dios, pero cuando usted teme, pone excusas para no hacerlo…
También puedes ver: ¡Necio!
El resto del Salmo es para aquellos que están dentro de la voluntad de Dios:
«Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos; has ungido mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando» (Salmo 23:5).
¡Todo mundo termina sabiendo quién está y quién no está dentro de la voluntad de Dios!
comentarios