¿Cómo saber si una relación está en crisis?
Hoy es común escuchar que una pareja se separe por diferencias. A las personas no les gusta lidiar con los problemas del matrimonio porque exige un cambio en uno mismo y reconocer que hay algo malo en ti.
Lamentablemente, pocos matrimonios ponen todo para salvar su relación pues saben lo importante que es la alianza que hicieron cuando se casaron.
“La mayoría de los matrimonios solo se da cuenta que la relación está en crisis cuando el otro no aguanta más. […] Cuando una crisis silenciosa se instala en la pareja y uno de los dos explota, muchas veces ya no hay nada que hacer o se deben hacer cosas más difíciles y más tardadas para recuperar lo que hubiera sido más fácil haberlo detectado desde el inicio”, explica Renato Cardoso.
Entre las señales que indican que hay una crisis conyugal son:
• Peleas constantes: cualquier cosa es motivo para pelear, un error de cualquiera de los dos cónyuges es suficiente para iniciar una discusión.
• Falta de intimidad: parecen más compañeros de habitación que pareja. Las cuentas, los hijos y la falta de tiempo son más importantes que su intimidad.
• No tenerse como prioridad: suelen perder el equilibrio por estar con sus hijos o sus amistades más que con su pareja.
• Falta de comunicación: no saben ni les interesa como está el otro y conforme pasa el tiempo, los intereses en común son menos.
• Critican más, elogian menos: cuando la relación está mal, las imperfecciones salen a flote y a lo que antes le restaban importancia, ahora parece que es lo que más les molesta.
Si detectas que tu relación está pasando por un momento difícil, asiste a la Terapia del Amor y aprende como rescatar tu matrimonio con ayuda de la fe. ¡No esperes a que sea demasiado tarde!
“Por una relación abusiva que tuve, intenté suicidarme tres veces”
“Por dos años, tuve una relación abusiva donde mi novio me quería controlar y saber todo de mí, hasta mi forma de vestir y las personas que me rodeaban. Muchas veces quise dejarlo, pero él me amenazaba diciendo que se quitaría la vida si lo hacía. Deprimida, triste y sola, me refugié en los vicios.
Si bien no discutíamos, era posesivo, no me dejaba estar con nadie más e intenté suicidarme tres veces sin éxito. No sabía cómo dejarlo, quería alejarme de él sin que se hiciera daño, me negaba a cargar con el sentimiento de culpa de saber que por mí había atentado contra su vida. Así que un día, sintiéndome impotente y vacía, me armé de valor y lo dejé.
En un momento de desesperación, viendo la televisión, supe que existía la Terapia del Amor y asistí. A pesar de la relación tan complicada por la que acababa de pasar, trabajé en elevar mi autoestima, aprendí a valorarme, a amarme y a ser más segura de mi misma.
Una vez que mi interior sanó, se me quitaron los pensamientos de que todos los hombres eran iguales y le pedí a Dios a alguien que me amara de verdad. Con el uso de la fe, Él me dio un hombre fiel con quien llevo dos años de casada.
El pasado se quedó atrás, quería un cambio, me enfoqué en ir hacia adelante y vencí”, Karen.
Terapia del Amor
Este jueves participe en Av. Revolución 253, Colonia Tacubaya,
a las 7:30am, 10am, 4pm y
principalmente 7:30pm.
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