¿Cómo demostrarles a tus hijos la importancia de la oración?

Enseñándole a tu hijo a orar

«Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él» (Proverbios 22:6).

La oración es el momento en el que nos desconectamos de todo y hablamos con Dios. Por medio de la fe y de la práctica de la oración nos conectamos a Él. Enseñarle al niño a seguir ese camino va más allá de usar las palabras. Es con el ejemplo y práctica que el niño va a empezar a entender la verdadera importancia de la oración. Sigue algunos consejos para incentivar a tus hijos a la práctica de la oración diaria:

• Sé el ejemplo: No basta solo con llevarlos a la iglesia, sino que necesitan ver que todo lo que aprendemos nosotros lo ponemos en práctica en casa. Además de nuestras oraciones individuales, también debemos orar con nuestra familia. Enséñales a hablar con Dios. Empieza explicando que la oración sincera es la que agrada a Dios y practica con ellos.
• Debemos enseñarles desde pequeños: El niño aprende tempranamente imitando a los padres. Si tu hijo ya es adolescente, conversa con él y explícale cómo la oración tiene el poder de transformar cualquier situación. En los casos en los que el hijo ya es adulto, también debe mostrar el valor de la oración. En los momentos de dificultad desafíalo a poner la fe en práctica y tener sus propias experiencias.

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• Llámalos para orar: Siempre al despertar llámalos para la primera oración del día. Enséñales a colocar el día que está empezando en las manos de Dios. Llámalos para orar antes de las comidas. Siempre que surja una dificultad llámalos para orar y enséñales la práctica de la confianza en Dios por medio de la oración. Antes de dormir, llámalos para orar nuevamente, enseñándoles a agradecer por todo lo que Dios hizo aquel día y por lo que hará en los días que vengan.
• Llámalos para leer la Palabra de Dios: Leer la Biblia con los hijos también es una buena forma de enseñarles a orar. Enséñales que la Palabra de Dios es el alimento para cada uno de nosotros, inclusive para ellos.

No olvides que la práctica es el mayor ejemplo que tu hijo puede tener, ¡y los padres son el primer y mayor ejemplo en la vida de sus hijos! No importa la edad o fase para transmitir esta enseñanza tan importante. Recuerda: esto será fundamental en la vida de quien tanto amas.

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