21 días agradando al Espíritu Santo

En esta ocasión, el propósito va más allá de la abstinencia de información

“Deléitate asimismo en el Señor, y Él te concederá las peticiones de tu corazón” (Salmos 37:4). ¿Qué ha hecho para agradar al Espíritu Santo? En este Ayuno de Daniel, serán 21 días de acciones y actitudes cuyo objetivo es agradar a Dios.

Durante este periodo, la información secular será dejada de lado, pues es necesario abstenerse de los contenidos de la televisión, internet y otros medios de entretenimiento que provocan distracciones, pero no solo será eso. “Este ayuno va más allá de la abstinencia de información secular. Vamos, activamente, a buscar agradar al Espíritu Santo con actitudes, Todos los días vamos a hacer esta pregunta: ‘¿Qué puedo hacer hoy para agradar al Espíritu Santo?’”, explica el obispo Renato Cardoso.

No será un Ayuno pasivo, con el objetivo de apartarse de los medios de comunicación, sino un Ayuno activo: puede ser ganar un alma, limpiar la Iglesia, dar un volante, distribuir el periódico, donar un libro, meditar en la Palabra, visitar un hospital o una prisión, etc. Abrirse para la Voz de Dios, por medio de acciones, es el objetivo principal. “Cuando agradamos a alguien, nos acercamos a esta persona. Lo opuesto también es cierto”, agrega el obispo.

A lo largo de estos 21 días, es importante practicar la fe, aunque eso no le traiga placer inmediato. “No es necesario ‘tener placer’ de agradar al Espíritu Santo. El placer quizás no venga antes, pero vendrá después. Basta pensar en lo que le agrada a Dios: meditar Su Palabra, ayudar a los afligidos, celar la Casa de Dios, etc.”.

Es el momento de alimentar los pensamientos con contenidos edificantes y, principalmente, agradar al Espíritu Santo para que Él impulse la verdadera y completa transformación en su vida. Participe.

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