Neuropatía diabética

La neuropatía es un daño en los nervios causado por la diabetes. De acuerdo con la Asociación Diabetes Madrid, podría ser la complicación más frecuente en quienes la han padecido durante varios años y se estima que llega a afectar a la mitad de los pacientes dependiendo de su gravedad y de su duración.

Este padecimiento se presenta por medio de úlceras en los pies y, por lo regular, termina requiriéndose la amputación. Por su parte, los síntomas de la neuropatía se van presentando poco a poco y estos pueden ser:
• Exceso de sensibilidad o pérdida del tacto
• Falta de coordinación al caminar
• Dolor o entumecimiento de las extremidades
• Desgaste muscular
• Cansancio
• Mareos
• Indigestión
• Sudoración excesiva y constante
• Diarrea y/o estreñimiento
• Sequedad vaginal
• Problemas de erección

Aunque la elevada presencia de glucosa por tiempo prolongado es un factor primordial para la aparición de neuropatías, existen otros factores, derivados de ello, que también pueden detonarlas, como: daños en los vasos sanguíneos, síndrome del túnel carpiano, hábitos poco saludables, falta de vitamina B-12. Asimismo, hay diversos tipos de neuropatías con sus síntomas específicos y, según especialistas, no existe un tratamiento que permita su cura. No obstante, con el debido seguimiento de profesionales en el tema, así como mejorando el estilo de vida, la intensidad de los síntomas puede disminuir.

Los dolores neuropáticos le impedían llevar una vida normal

“Los médicos me diagnosticaron diabetes tipo 2, la cual es muy agresiva: me daban dolores de cabeza terribles, alergias, se me deshidrataba la piel y tenía neuropatías, estas últimas comenzaban desde los hombros hasta las puntas de los dedos, cosa que me impedía siquiera agarrar mi bolsa de mano o un libro.

Me la pasaba tomando pastillas para poder trabajar con normalidad. Además, empecé a perder la audición y sentía un dolor en el oído derecho que no me dejaba escuchar a los demás, sólo mi voz. Mi vista también la estaba perdiendo, la graduación de mis lentes no era suficiente; esto aunado a que me sentía muy incómoda, estresada, cansada y enojada.

Todos estos padecimientos estaban agotando mi paciencia, los medicamentos no me ayudaban. Tras haber buscado ayuda en diferentes lados sin encontrar respuesta, supe del Centro de Ayuda Universal y me di una oportunidad de conocer el trabajo que hacían. Aquí, entendí que las bendiciones llegarían si yo perseveraba, por eso acudí a las reuniones con frecuencia y, sobre todo, con la convicción de que sanaría: los dolores neuropáticos fueron los primeros que se me quitaron.

Progresivamente, las otras enfermedades fueron cediendo, como la diabetes y sus malestares, el problema de la audición y el de la vista. Los dolores de cabeza, alergias y demás también desaparecieron. Hoy en día, después de un proceso que requirió fe, tengo un perfecto estado de salud. Pero, lo más importante es que le entregué completamente mi vida a Dios”, Fidelina Vargas.

Participe los días martes de la Reunión de Sanidad en el Centro de Ayuda Universal más cercano.