Una reunión para salir de la oscuridad

“Comenzó con un dolor de cabeza que incrementó, veía sombras, me daban ataques de pánico y dormir era imposible. Los psiquiatras me daban ansiolíticos y antidepresivos, pero nada me servía. Pensaba en el suicidio como una alternativa”, relató Lourdes, una de los miles de personas que han participado los viernes en la reunión de liberación.

¿Qué lleva a alguien como Lourdes a vivir de esa forma?

Lo creas o no, los espíritus malignos existen y su misión es destruir tu vida. Por eso, en el Centro de Ayuda Universal dedicamos un día completo para acabar con ellos.

‘Una de las principales revelaciones divinas en el trayecto del Centro de Ayuda Universal es desarrollar una estrategia de enfrentamiento feroz y directo contra el mal, como ninguna otra institución lo hace en el mundo’, comenta el obispo Edir Macedo.

Cada vez son y serán más las personas que han sido liberadas en las reuniones de limpia espiritual que se llevan a cabo los días viernes en todas nuestras sedes, de los tormentos, enfermedades y diagnósticos que la ciencia no ha podido curar.

Acompáñanos y por tu fe dirás “soy libre”.

Su desolador panorama cambió

Guadalupe Martínez

“Por un abuso que sufrí de niña, caí en depresión. Tomaba buscando una salida, pero solo encontré problemas en casa. Me sentía sola e intenté suicidarme.

En el Centro de Ayuda Universal estaban haciendo un propósito con el Manto y asistí. Como resultado de tocarlo con fe, poco a poco, dejé los vicios y salí de la depresión. No fue fácil, pero creí que Dios me ayudaría. ¡Cambió mi vida en todos los sentidos!”.

José Adolfo Reynoso

“Duré cerca de 25 años en los vicios, con depresión, insomnio y ataques de pánico. Se destruyó mi familia y quedándome sin trabajo por cuatro años, los problemas económicos no faltaron. Me hundía cada vez más.

En una noche de insomnio, supe que en la Universal estaban pasando el Manto e invitaban a quien tuviera problemas. No me arrepiento de haber asistido, ya que ahora no tengo vicios ni conflictos económicos y espirituales. Además, mi familia se restauró”.

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